miércoles, 12 de febrero de 2025

12 de febrero


Unas ciento veintisiete lunas y dos trajes después, vuelvo aquí a confirmarte que aplico a diario cada una de las cosas que me enseñaste, amén de algunos trucos de cuño propio que te sorprendería conocer. Te extraño, ¡faltaría! 

Nadie imagina su futuro sin esas piezas que le dan consistencia mientras lo esbozas a lápiz sobre papel, que, cuando desaparecen, te obligan a borrar todo e imaginarlo de nuevo, esta vez con la conciencia de que más pronto que tarde volverá a faltar alguien indispensable y se hará necesario reanudar el mismo trabajo aunque con diferentes ganas.

Te extraño, ¿cómo no iba a hacerlo? Me gustaba reír contigo y me gustaría mostrarte hasta dónde han llegado aquellas viejas conversaciones en las que, antes de dormir, me hablabas de Fangio, Clark, Moss, Stewart y el rapidísimo fenómeno brasileño Fittipaldi, en las que, casi sin darnos cuenta, me inoculabas poco a poco el veneno por todo esto...

No hay comentarios: