No creáis que no tenía ganas de celebrar los funerales a 2024 y convertirme en una acuarela de Hugo Pratt sobre un papel blanco que, en estos instantes, insinúa centenares de promesas.
Cumpliré 66 este próximo agosto. A comienzos de ese mismo mes Nürbu alcanzará la mayoría de edad, y el viaje que iniciamos en 2007 cobrará más sentido si cabe, porque habremos recorrido juntos los siete mares de Simbad y nos quedarán otros tantos por descubrir para hundir naves inglesas, cobrar venganzas, ajustar cuentas, robar tesoros y enamorar doncellas en cada puerto donde arribemos.
Mil vidas, una, un fragmento. Estrenamos año y huele a nuevo como la mañana luminosa que baña Gorliz. Que corra el ron, a esta ronda invito yo...
Os leo.
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