domingo, 29 de octubre de 2023

Fidelización por cojones


No diréis que no sé portarme. He pedido paciencia con Aston Martin, he preferido no alarmar más de la cuenta al personal, pero en un circuito como el Hermanos Rodríguez, donde el aire es menos denso que a nivel del mar y la aerodinámica merma su importancia en el cómputo general, que el AMR23 chute peor que en cualquier otro sitio sólo apunta a que la Unidad de Potencia Mercedes-Benz sufre de males de despecho.

Nadie lo va a decir abiertamente pues ahora se cuidan muy mucho estas cosas, pero desde el anuncio en mayo en que la de Silverstone firmaba con Honda para 2026 en adelante [Aston Martin usará motores Honda a partir de 2026], el comportamiento del cacharrillo verde comenzaba un errático viaje hacia el ocaso. Nueva fábrica, nueva construcción de gomas, nuevas reglas sobre flexibilidad de las alas, lo que queráis, si en Ciudad de México no hay manera de sujetar el monoplaza al asfalto y las prestaciones son rácanas de narices, me animo a señalar como responsable a la falta de empuje.

Tampoco debería extrañarnos. Al te podemos tocar el motor para que pierda unas décimas sin que nadie lo note de (Norbert) Haug en el tramo final de la temporada 2007, podemos sumar a Dennis apuntando directamente a la de la estrella de tres puntas en octubre de 2014, inicio de la era híbrida: «No tener acceso al código fuente que permite administrar y conservar la energía es terrible en el tiempo por vuelta, ya que es vital para conseguir un coche bien equilibrado. En las curvas perdemos mucho tiempo, y no podemos obtener todo el rendimiento del motor...» [Ron Dennis protesta por el trato de Mercedes en los motores para McLaren].

Ya he pedido disculpas a Rosalía. Ella supo verlo allá como en junio de este año, aunque me limité a aportar las consabidas respuestas que siguen proporcionándonos desde las retransmisiones y redes sociales, pero la Fórmula 1 moderna exige una mínima respuesta del propulsor para que la aerodinámica funcione adecuadamente, y si en México, como he mencionado antes, la aero cobra menos importancia pero los problemas siguen, de toda la vida de Dios eso es cosa del motor, y del hijo de su madre de suministrador de UP que asume que juego limpio es todo eso que le beneficia, exclusivamente, y que si hay alguien que pretende salir en otra foto, lo pagará caro.

Electrónica, ¿os suena?, pues si no puedes acceder al código fuente estás vendido así jure la FIA por sus zapatitos de primera comunión que todos los propulsores de la misma marca son idénticos y rinden igual.

Os leo.

2 comentarios:

Antonio L. dijo...

2026 suena demasiado lejos y me temo que ni Adrian Newey en persona con su maravillosa aerodinámica podría compensar el déficit de potencia que adrede están haciendo los Teutones con los de verde.

Malos tiempos para Fernando, una pena que cuando por fin le proporcionan un cacharrillo decente, el fantasma de Norbert Haug resurgen en forma de Toto Wolff........ auuuuuuuuuuuu.

Una pregunta Maestro. ¿Qué puede hacer Aston Martin si La Merche tiene un ataque de cuernos y te ha capado?.

Un saludo de un alonsista.

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Antonio!! ;)

A corto plazo lo veo complicado. A lo que podemos palpar se suma que Toto es accionista de Aston Martin (1% que se conozca) y Mercedes-Benz estaba implicada hasta las trancas hasta quien dice anteayer... Puesto a barruntar, me inclinaría a pensar que Wolff está echando un pulso a don Lorenzo Stroll por mejorar sus propias opciones ante la posible compra por parte de Aramco. Si fuese así, que ya te digo que no lo tengo nada claro, este episodio sería algo pasajero, un aviso serio que no tiene por qué llegar a mayores, y deberíamos esperar a ver cómo maniobra Stroll padre :P

Quedan por delante 2024 y 2025, y tampoco veo a Mercedes-Benz por la labor de que se note demasiado cómo puede asfixiar a sus clientes

Abrazote <3<3<3

Jose