domingo, 26 de enero de 2014

Smaug se llama F14-T


Seamos sinceros, puestos a buscar equivalentes animales para clasificar los coches que nos han comenzado a enseñar, en vez de encontrarlas en tapires, elefantes o monos narigones, también podríamos ser un poquito más imaginativos y acceder a ese vasto mundo que nos proponen las tradiciones milenarias. Por ejemplo, ¿qué tal un dragón? Ahí lo tenéis. Una pista: los ojos serían las entradas de aire de los pontones. La nariz dejaría de ser grotesca, e incluso los bigotes con la publicidad del Santander ayudarían a dibujar la cabeza de un dragón rosso con aspecto bastante fiero y agresivo...

Vale, siendo ilustrador y editor de Juegos de Rol, amén de escritor a tiempo partido, estas cosas me resultan bastante fáciles, vamos, que en cierto sentido juego con ventaja, pero a lo que íbamos: ayer fue presentado el F14-T de Ferrari, y para que no quepan dudas os diré que me encanta y que me parece el cabezón de Smaug o uno de los siete que disponía Herensuge (leed esta última palabra como si entre la «g» y la «e» final existiera un «u» castellana, y de paso aprendemos algo de euskera). 

Dicho lo cual, el trasto italiano es el único que se ha desmarcado de la tendencia más barajada en las últimas semanas. Ni dispone de una nose puntiaguda como en el caso de los MP4/29 de McLaren y FW36 de Williams; ni se apoya en una bifurcada (tipo morsa) como al parecer hará el E22 de Lotus a tenor de la imagen que nos ofrecía el otro día, y como se intuye también en el VJM07 de Sahara Force India. No, el F14-T presenta una nariz aplanada y de terminación rectilinea que sujeta el ala anterior gracias a dos pequeños soportes, para ofrecer a renglón seguido un generoso volumen inclinado que se funde a través de una curvatura cóncava con la sección donde comienza bajo la carrocería, la célula de seguridad que alberga el habitáculo.

A priori, me da la sensación de que esa nose tenderá a pegarse al suelo por simple oposición al aire, convirtiendo en protagonista a la zona central del vehículo ya que el caudal de aire frontal parece bastante asegurado, cuestión a la que ayuda el uso de suspensiones pull-rod en el eje delantero. Con lo cual, el boat primero y la parte más adelantada de los pontones después, se encargarán de organizar los flujos con dirección a la zaga.

Obviamente, con pull-rod delantera y trasera, el F14-T abunda en la propuesta de poco rake ya significada en el F2012 y F138. Por lo demás, se puede ver que el tamaño de las aberturas de aireación de los sidepods es más pequeña, mucho más pequeña a decir verdad, que las mostradas de momento por sus rivales, lo que apunta a un menor drag en esa zona en concreto.


Ya os mencionado antes que me encandila este draco rosso. Tal vez tenga la culpa tantos años acusando a Ferrari de conservadora, pero la propuesta me gusta porque parece eficiente y porque por primera vez en mucho tiempo, veo suficiente riesgo en el diseño de Maranello como para pensar que sólo por eso, el F14-T puede ser una apuesta ganadora en manos de Kimi y Fernando.

¿La zaga? No se me ha olvidado, pero si en el MP4/29 ya parecía complicado valorarla sin datos, en el caso del monoplaza italiano, que la ha pintado de negro, confieso que no sé por dónde comenzar a meterla mano.

Os leo.

4 comentarios:

¨brutus dijo...

este coche parece una ballena beluga esperemos que sea algo mas rapido aunque lo dudo

Anónimo dijo...

Más que F14t, su nombre es fiat. WTF?

Anónimo dijo...

El pesimismo por joder, es un opcion muy inteligente. Es lo que a muchos les gustaria. Esta vez con todo lo que llevan y tienen esta un poco mas complicado para los Anti.
Saludos para los que pueden argumentar ;)

GRING dijo...

¡Veo ese dragón y me apunto al nombre de Dracco Rosso!. Y espero que los correctivos que inflija sobre la competencia sean también "muy" draconianos. Ya conocemos la apariencia. Ahora nos falta su realidad en pista en comparación con el resto de la tropa. Saludos