domingo, 23 de mayo de 2021

El peregrino

Hemos sufrido suficiente como para no arrugarnos por cuatro chorradas... ¿Dónde coño está Alpine?

La pregunta más recurrente de este inicio de temporada 2021 tiene una respuesta sencilla: donde tocaba estar, de momento, aunque ese bendito lugar no sea el que señalaron los vendehumos a comienzos de año, cuando tocaba inflar el globo del retorno de Fernando a la máxima disciplina porque el asturiano no podía volver a un equipo cuyo objetivo estaba puesto en 2022, no, que mira que lo han repetido veces, sino que tenía que regresar con opciones de victoria y bla, bla, bla...

Ante el aplastante dominio de Mercedes AMG, incluso aceptando sus juegos florales al respecto de los muchos enemigos que tiene (sic), lo inteligente era lo que han hecho Ferrari, McLaren y Alpine, aunque a esta última se le esté notando poco: medir el terreno y centrarse en las posibilidades reales, no en estimaciones halagüeñas, y no hay que ir muy lejos para comprobar lo sensato del enfoque porque ahí tenemos Aston Martin, que se las prometía para arrinconar a Red Bull y anda ahora mismo por detrás de Alpha Tauri.

En marzo escribí una de esas series que me sirven para hacerme una idea de lo que se cuece, que no tuvo mayor trascendencia porque no vendo motos ni pretendo prosperar en redes sociales a base de notissión diario [#2021]. Bien, como podéis leer en ese hilo de textos, propuse a Maranello para segunda a final de año, a Woking para afianzarse en la cuarta plaza y a Enstone para hacer de mosca cojonera con los papaya: «Dicho esto, me temo que Fernando Alonso y Esteban Ocon van a luchar más con los McLaren que con los Aston Martin —enseguida va mi visita a Silverstone—, pero siempre en el grupo de llamados para la gloria detrás de los tres grandes, seguramente porque el objetivo de Alpine no es esta temporada sino 2022» [Bonjour mesdames et messieurs (Alpine)].

Tampoco es que me saque estas cosas de la manga. Ferrari venía de un año pérfido y era lógico imaginar que no iba a estar para lidiar con Mercedes AMG. McLaren estrenaba propulsor Mercedes-Benz y resultaba razonable pensar que iba a encontrarse más cómoda defendiendo el cuarto puesto que logró en 2020, ya que la unidad de potencia alemana siempre supone un plus en pista. ¿Renault, ahora Alpine? Bueno, la francesa sigue sudando la camiseta como hizo el año pasado porque su motor necesita bastante trabajo, sobre todo en el área del MGU-K, y no cuenta con equipos cliente que alivien este esfuerzo.

Además, el chasis del A521 fue diseñado en 2019 para el RS20 de 2020, la campaña puente para el estreno de nueva normativa, que, por mor de la pandemia, se ha retrasado a 2022, trayendo consigo la congelación absoluta del bendito apartado en 2021...

No son excusas, entendedme, son hechos contrastables que aportan contexto a la ecuación. Y es que lo que le pasa al A521 es que jamás estuvo para eso que nos contaron hace un puñado de meses. Está (estará) para pelear en la cabeza de la montonera y para alguna alegría con cuentagotas, pero no jodamos, llevamos a cuestas sólo cuatro pruebas, que en sentido estricto suponen parte de la pretemporada ya que tres días de test no dan ni para untar la mantequilla en el pan.

Sigo siendo optimista por todo esto que estoy contando y porque esta sesión cuenta con 23 citas. Hay mucho espacio por delante y los traspiés entraban en nómina, vamos, que no deberían pillarnos de nuevas, salvo, acaso, porque creímos a los vendehumos y consideramos que el Nano podía revertir en un par de días una situación que pasaba por completar (en solitario, dos coches, no más) el desarrollo de la Renault E-Tech 21 sobre un chasis congelado, en un entorno aerodinámico que tiene sus complicaciones con el nuevo reglamento, y con unas gomas Pirelli que han tirado a la basura casi toda la información recabada en 2020.

Tocaba adaptarse o morir, y Fernando nos ha dicho muchas veces que venía a adaptarse para preparar bien el proyecto 2022, no a calzarse el Mundial en 2021. ¿No nos gusta verlo amustiado o fuera de su tono habitual? Sí, desde luego, no tardaré mucho en dedicarle unas líneas, pero a lo mejor todo consiste en que él también está gestionando la situación para que la presión no le supere y dé al traste con el objetivo principal: mejorar el A521 para que sirva de plataforma de despegue al monoplaza de la temporada próxima.

No os voy a pedir paciencia porque no me hacéis ni puto caso, pero dadle una par de vueltas al ladrillo que acabo de soltar y, por Dios, abandonad la idea de ahorcaros o abriros las venas tan pronto. 

Os leo.

3 comentarios:

Antonio L. dijo...

Capitán del barco, que bien manejas el timón y que sabias son tus palabras.

Un abrazo para el Capitán que me da esperanzas y que también sabe expresarlas.

Un seguidor del blog (Antonio L.)

Unknown dijo...

Buenos días, el vuelo se remonta, pero a qué precio.
Un saludo y besos mil.

Unknown dijo...

Buenos días, Jose!

Pues sí, toda la razón en cada punto del artículo. Quien quiera creer que en el equipo Alpine estaban pensando en competir por el título este año, es que tiene mucha imaginación, es muy muy muy optimista o ve las carreras pero no se entera de nah (que será lo más probable).

Alpine es un proyecto a largo plazo y una de las cosas que lo indica es que Alpine es el único que calza un Renault. Salvo Alpine, nadie usa Renault. No es el mejor motor pero nadie duda de que saben hacer motores porque tienen capacidad para hacerlo. Si Alpine empieza a ganar, los equipos volveran a comprar motores Renault y no habrá problemas porque no serán motores ¨en teoría¨ mejores para Alpine, porque a pesar de ser Reanult, no es directamente la imagen de Reanult. Parece una perogrullada pero yo empiezo a ver que esa era la jugada.

Estas cosas ya van indicando que el proyecto es serio, meditado y que tiene un fin.

Un abrazoooo desde el lejano oriente!! xD