jueves, 25 de enero de 2018

Los derechos y el revés


La compra de los derechos en exclusiva para la retransmisión de la Rolex 24 at Daytona de este año en España por un conocido canal de deporte balompédico, ha levantado una bonita polvareda cuando lo que debería haber hecho es abrir un debate más o menos serio sobre la pertinencia, o no, del modelo monopolio a la hora de ofrecer espectáculos televisados o por internet.

Ya hemos hablado de esto mismo en otras ocasiones, por descontado y con más énfasis, cuando Movistar se hizo con los derechos de la F1 en exclusiva y dejamos de poder ver a Antonio Lobato en nuestras pantallas. Al respecto de la figura del periodista asturiano seguro que también he echado algunas líneas porque nunca fue cierto del todo que hubiese obligación de aguantarle a él y su equipo ya que existían alternativas para disfrutar de las carreras con diferentes comentarios y perspectivas. Había que buscarse la vida, esto es obvio, pero lo cierto es que no estaba complicado aunque fuese necesario entender algo de inglés.

Soy un firme defensor de las retransmisiones en abierto porque creo que son más productivas para el aficionado que las otras. Hace muy poquito he leído algo sobre que la liga de fútbol se va a poner más dura con los equipos a cuenta del Reglamento de Retransmisiones, que tiene su tela que exista una cosa así [La Liga sanciona al Celta porque sus aficionados no llenan la grada que se ve a través de la televisión].

Y éste es uno de los problema reales y contrastados del formato Pay Per View, que tarde o temprano necesita enmascarar que hay que pasar por caja y además, todo tiene que parecer la mar de atractivo aunque no lo sea, ya me entendéis. El otro, para mí fundamental, es que ni mejora las audiencias ni ayuda a crear tejido de nuevos aficionados.

Podía haber titulado esta entrada con la mítica frase de don Rodrigo Rato, a quien Dios confunda: «eso es el mercado, amigo», pero por no enredarme y seguir con lo que llevo entre manos, diremos que la compra de los derechos exclusivos para España de la Rolex 24 es legítima como negocio ya que la citada se asegura con ello una audiencia mínima, pero tampoco podemos negar que tiene trampa.

La presencia de Fernando Alonso Daytona es el principal aliciente en esta operación que no prevé ni ofrecer previos ni clasificación ni moñadas extras, y que además impide que la podamos ver por el canal de IMSA. La prueba y a pelo, para que nos entendamos, aunque debido a la elección del equipo que la retransmitirá, todos imaginamos que nos exponemos a sufrir una clase magistral de 24 horas de duración por el módico precio de 6 euros.

El dinero no es por tanto el problema, lo es la ausencia de alternativas y la reticencia a admitir que de no participar el de Oviedo podríamos seguir disfrutándola como hemos venido haciendo hasta quien dice hoy mismo. Ahí duele la cosa y resulta comprensible el cabreo del personal, tanto alonsista como aficionado al motorsport de toda la vida.

Espero y deseo que todo vaya bien y resulte un rotundo éxito, faltaría más, incluso si el Ligier dorsal número 23 abandona en las primeras vueltas. Y cómo no, que el año que viene se repita la experiencia pero con el paquete completo aunque el precio suba un poco: entrenamientos, Roar, clasificación y celebración de disputa por 20 euros no me parecería nada mal...

Os leo.

3 comentarios:

enrique dijo...

A base de no ver fútbol estoy perdiendo la afición. A base de no poder ver moto gp estoy perdiendo la afición. Con la f1 no me pasa... De momento. Pero no creo que sea lo mejor para crear afición el pay per view. Yo defiendo la retransmisión en abierto con señal de la FOM y en ppv con una retransmisión más abierta, de mayor calidad para quien quiera buscar más cosas.

Anónimo dijo...

totalmente de acuerdo con Enrique. Las carreras y clasificaciones en abierto y quien quiera análisis, entrevistas y demás en algún canal d pago (si hay más de uno para poder elegir, mejor.Y sobre que había alternativa a Lobato, es cierto. Y sin necesidad de ser en inglés. Por entonces se retransmitían las carreras por la radio (en realidad dos radios, la Cope y la SER), así que tan fácil como bajar el volumen de la tele y poner la radio

marta

Fleichié dijo...

Es un hecho comprobado que cuando se privatiza un deporte , pierde audiencia y poco a poco aficionados . Liberty entró diciendo que iba a pesar mucho más la posibilidad de recuperar audiencias que la cuantía del contrato televisivo . Y a las primeras de cambio , vuelve a renovar con movistar......empiezan bien .
Yo , desde el "apagón público" , y el posterior monopolio , sigo la f1 por la sky inglesa .
Y aunque suene a anatema , hecho mucho de menos a Lobato y a Gonzalo Serrano . Tengo grabadas todas las carreras que retransmitieron y no cambiaría sus comentarios ni por todo el oro del mundo .
Aunque hoy día , con esta sociedad de pensamiento único que tenemos que soportar , no sea políticamente correcto decirlo , Antonio me parece un narrador magnífico , y toda la corriente inquisidora que hubo desde internet para cargarse primero al mítico "sanganchao" , y luego al propio Lobato ,aunque insensata y de un postureo inaguantable , al final consiguió lo que andaba buscando . Felicidades .
Sinceramente espero que ahora disfruten y se diviertan muchísimo con las "soberbias y entretenidísimas retransmisiones" de movistar .
Yo si quiero ver una carrera bien narrada y con la épica que necesita me pongo alguna de las antiguas y disfruto como si fuera en directo ...
Saludos . Te leo maestro .