sábado, 22 de junio de 2019

Niki y Valtteri


Anteayer hizo un mes exacto desde que Lauda nos dijo adiós definitivamente, y aunque no venga mucho a cuento, prefiero echar el rato divagando un poco que relatando cómo a nuestra silla se le ha desprendido una de las dos patas que le quedaban para sostenerse en pie, aunque de aquella manera, también es verdad.

Nos queda Bottas, pero él no cuenta [Los fieros], ni siquiera hoy, cuando habiendo obtenido la segunda plaza en el Gran Premio de Francia muy bien podría amargar la fiesta de Hamilton en la arrancada de mañana, y más allá, quién sabe. ¿Hay alguien ahí?

Si tuviéramos la dicha de que estuviera con nosotros Roberto, sé que esta tarde habría hablado con él como he hecho esta mañana con don Manuel y Miguel. El deporte, la Fórmula 1, necesita urgentemente algo a lo que agarrarse si pretende sobrevivir, y mira tú que he pillado esta bonita instantánea de Niki y Valtteri y me he dicho: ¡rápido, dale cera!, ¡menciona nuestro pasado como narcótico milagroso y el látigo de la indiferencia que nos contaba Martín en la entrevista que nos permitió hacerle [#VKt-05 (Martín Caño)]! ¿Hacen buena pareja, a que sí...?

Lo mejor comenzará el lunes. Seguiremos con Vasselon, Toyota, y ése a quien no debemos nombrar, so pena de que en caso de hacerlo nos alcance un rayo y nos fulmine. Todo sea por mantener viva la llama aunque sea en base a sucesivas maniobras de distracción. 

—¡Por fin es viernes!

—Pablo, ¡eres el compañero de celda más imbécil que he tenido jamás...!

Y nada más. Cruzando los dedos para que Toto y Mattia liberen a Valtteri y Charles de sus responsabilidades durante el Gran Premio de Francia, me despido de vosotros sin saber muy bien si esta noche se me ocurrirá una nueva trastada con la que entreteneros.

Os leo.

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