domingo, 30 de junio de 2019

Los vicios del FOM


Cuando los Mercedes AMG dejan campo libre para que los de Segunda División jueguen libremente, ocurren cosas como las de esta tarde: el espectáculo vuelve por sus fueros y con esto de los cochecitos de colores se divierte hasta el Tato. 

Por la razón que sea —no es un Expediente X que me atraiga especialmente—, Brackley ha decidido hacer mutis por el foro en Spielberg, cosa que es de agradecer —básicamente porque soy humano y estoy a rebosar de debilidades—, y lo ha hecho con gallardía y savoir faire, no como en el Gran Premio de España de 2016, ni mucho menos como aquí mismo el año pasado, cuando los dos coches de la estrella de tres puntas sufrieron uno de esos incompresibles fallos dobles que no les afectaban desde hacía decádas.

Pero a lo que vamos. A la espera de la resolución de la FIA que dirimirá quién ha ganado finalmente el Gran Premio de Austria, me apetece echar unas letras sobre lo feo que resulta el ninguneo que está haciendo la FOM sobre nuestro compatriota Carlos Sáinz, que dices que pasa una vez y puedes llegar a pensar que es fruto de la casualidad, pero si la cosa se repite y sigue repitiendo, empiezas a pensar que hay gato encerrado y, además, maulla.

No sé hasta qué punto Liberty ha hecho limpia en el bendito aparato propagandístico heredado de Bernie Ecclestone, pero da la sensación de que todavía no se ha retocado lo suficiente. Todavía recuerdo cuando en 2013 Marussia no estaba al corriente de sus pagos con la Santa Institución y era rea de silencio en las retransmisiones, y cómo la fortuna quiso que el cacharro de Jules Bianchi, en rebeldía, copó generosos segundos y acumuló espacio en los medios, cuando una vez varado en el lateral del circuito de Nürburgring, decidió desplazarse hacia atrás llegando a ocupar la pista hasta que la abandonó por el otro lado de la misma...

Sirva este chascarrillo para concretar que la british FOM era a Bernie como el Safety Car a Charlie Whiting: sujetos pasivos que tomaban protagonismo cuando hacía falta para sesgar la narración de los hechos a un lado o a otro. Y cabe recordar aquí mismo que, cuando el grueso de nuestros modernos redactores de contenidos recién empezaban a descubrir mundo, los adultos de entonces ya nos echabamos unas risas con los resúmenes de cada carrera.

Pena que este material sea en la actualidad el más asequible en plataformas como Youtube, y pena, también, que un bicho que se ha dejado los huevos por firmar una estupenda carrera siga pasando sin pena ni gloria y su legado acabe llegando a nuestros nietos sin pena ni gloria, simplemente porque la FOM ha decidido volver a mirar para otro lado. No me consta que me lea nadie de Liberty Media, pero si por un casual estoy equivocado, ruego a quien sea que entre a saco con la encargada de las realizaciones y limpie en plan stalinista hasta el último recoveco, porque la credibilidad se gana siendo honesto con la verdad, y se pierde en un santiamén con deslices como el que se lleva repitiendo contumazmente con ese español que conduce para McLaren.

Os leo.

3 comentarios:

Elín Fernández dijo...

No es ni inglés ni alemán. Ahora hay que ser también holandés porque la de la botella verde paga unos millones de dólares que pa que te cuento.

Anónimo dijo...

No tanto por lo alemán, sino por lo austríaco. Redbull puso mucho dinerito en su etapa de dominación. WRC, etc.

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenas tardes

Elín ;) Heineken y sus cosas, ahí le has dado :P

Anónimo ;) Con Bernie había que pasar por caja o no había tu tía ¡ja,ja,ja,ja!

Abrazacos ;)

Jose