martes, 18 de junio de 2019

La caja de bombones


Comienza a ser desesperante, no me digáis que no. La pataleta del Gran Premio de Canadá va camino de convertirse en poco menos que la Boda del Siglo, de ésas que tenemos a patadas cada lustro. Y menos mal que Vettel se fue de rositas después de un comportamiento infantil que le debería haber acarreado sentarse en el banquillo un par de carerras.

No, un profesional de su supuesto calibre no puede no llevar el coche a la zona de honor. Tampoco puede irse a la sala de comisarios como si fuese a partir la cara a alguien, ni puede volver para cambiar los paneles de sitio, ni puede calentar al público para luego hacer postureo de adolescente en el podio. No, no puede hacerlo porque se está cagando públicamente en esa misma autoridad a la que debe tanto y tanto. Si, además, es tetracampeón del mundo, no queda bien exponerse de esa manera y mucho menos llevando consigo al barro a La Scuderia...

Bien, lo hizo y la FIA tuvo los santos cojones de pasárselo como cuando insultó por radio a Charlie Whiting o cuando golpeó intencionadamente a un coche rival, pero alguien debía haber parado todo esto salvo que trate de ocultar con el ruido ambiental la pésima gestión de este inicio de temporada.

Los despachos son un recurso legítimo, es obvio, pero con siete carreras disputadas y 7 puntos a disputar suena a quemar cartuchos a lo bobo. Hamilton saca a Vettel 62 puntos y Maranello debería apretar los dientes y recuperárselos en pista a Brackley a lo largo de las catorce pruebas que quedan. 

No soy el único tifoso que piensa que esto es ridículo y que con Luca Cordero di Montezenolo al mando la sangre no habría llegado al río. El calentón inicial puede tener un pase pero lo que vino después no hay por dónde cogerlo, ni siquiera en el comportamiento huevón que mostró la FIA con el niñato rebelde. Tocaba parar, recuperar la frialdad de cabeza, asumir que Ferrari está por encima, que el equipo está por encima, que las personalidades nunca son más que el grupo. Tocaba redirigir el campeonato, comprender que el SF90 está de vuelta, centrarse, todo menos dejarse llevar por la histeria del camarada Vettel.

Son 7 puntos los que se van a revisar. En caso de que se consigan recuperar, Lewis seguirá estando a 48 después de siete citas disputadas, y cruzo los dedos para que Vettel y Binotto entiendan que este saldo es el importante. El buen chico que llevó una caja de bombones a Montezemolo la primera vez que se reunieron, ocultaba que algunos de ellos estaban envenenados. Hay batallas que se ganan no yendo a ellas. Ruego a Dios que Sebastian no vuelva a cagarla porque Ferrari va a ser el hazmereír de todo el mundo y nadie con dos dedos de frente se atreverá a defenderla.

Os leo.

7 comentarios:

Cao Wen Toh dijo...

Me pregunto: ¿cómo es posible que alguien saque media rueda de la línea y le caigan sanciones hasta por haber respirado en ese momento y al niñato éste se le perdonen semejantes burradas? Y me respondo: porque antes se le pasaron por alto burradas más grandes al niñato inglés y hay que compensar a la histórica ahora que ya no está el enemigo en sus filas.

Antonio L. dijo...

Flaco favor le harían a la competición si exoneraran a Vettel de la infracción que cometió. A partir de este punto "barra libre" porque ahora cualquiera puede decir que como no ha podido dominar el coche pues se lleva puesto a quién sea.

Lo interesante es que quedan muchas pruebas por disputar y si se lucha en todas ellas consiguiendo dobletes, la distancia empezará a mermar y podrán tener una oportunidad al final del campeonato. Pero la pregunta es ¿Vettel quiere luchar o se ha quedado sin gasolina? ¿Ferrari quiere morir con las botas puestas o bajo el yugo de la desesperación de su piloto estrella? ¿Van a buscar soluciones o la próxima temporada más de lo mismo?........

Bombones, cuidado que engordan.

Un saludo de un Alonsista.

karatecla dijo...

No, no: están discutiendo una victoria, no 7 puntos cochinos que saben perfectamente que no valen para nada.
Se llama arropar a tu piloto.
Además, están en su derecho de reclamar si no están de acuerdo.
Yo, de hecho, tampoco estoy de acuerdo, pero para eso tenemos árbitros.

Pero que sí, que Seb, aunque me caiga bien como ñersona, ha perdido el oremus hace tiempo...

Anónimo dijo...

Reclaman ahora y no por aquellas banderas amarillas...
Todo lo que le pase a Ferrari además de ser poco, se lo están ganando a pulso.

Un saludo
Sr.Polyphenol

Agustin Cangas dijo...

Hace pocos días hiciste un comentario que Vettel debía ser un poco más hombre y por ejemplo, haber orinado el habitáculo de Hamilton en Bakú. En qué quedamos?

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenos días ;)

Miguel ;) Mirado en perspectiva, la F1 tiene lo que se merece. Grúas, condescendencia, tirones de orejas, y ahora una mecha lista para prender y hacer que todo salte por los aires. La FIA es la que más ha salido perdiendo, ha dejado que la orinen en los pantalones y eso sienta un feo precedente para ella y para Liberty… No sé qué decisiones se tomarán a partir de Canadá, pero como dice Antonio más abajo, como no se muestren firmes esto va a ser un barra libre :P

Antonio ;) Y tanto que engordan. El Mesías de Maranello arrastando por el barro el escudo de Baracca. Si viviera Enzo esto jamás habría ocurrido.

Abrazotes

Jose

Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenos días ;)

Karatecla ;) No, la victoria la perdieron desde el momento mismo en que Sebastian prefirió quejarse por radio en vez de sacar los 5 segundos que le hacían falta. Luchan por 7 puntos, y lamento decirlo, pero no están arropando a Vettel, me temo que le están preparando la puerta de salida a la separa de que continúe metiendo la pata :P

Polyphenol ;) Montezemolo era mucho más cauto e inteligente que toda esta gente. Ferrari estaba en horas bajas en el paddock y, políticamente, quizás convenía no reclamar un campeonato que se había servido en bandeja a Vettel y Red Bull. Ahora es más chusco. No s eva a ganar nada, me temo, y lo que se puede perder es mucho :P

Agustín ;) Ante todo bienvenido. Lo de ser un poco más hombre no va con hacer cosas más catres, sino con aceptar las consecuencia.

Ni en Bakú 2017 ni aquí las ha aceptado Sebastian. Tira la piedra y esconde la mano. Le falta remate, hablando en términos de fútbol. Haces una chaflanada y aceptas que te han pillado. Te cabreas, que es legítimo, y aceptas que te manden a casa dos Grandes Premios… Eso es para mí comportarse como un hombre, lo otro son chiquilladas a la espera de que vengan mamá o papá a salvar los muebles ;)

Abrazotes

Jose