Tras hacerse de rogar, por fin hoy hemos podido ver el E22 de Lotus en todo su esplendor y no como un remedo del coche de 2013, cuando hace cuestión de días, la escudería de Enstone aprovechó el primero de sus filming days para rodar un poco con un híbrido E22/21 al que se le presupuso entonces, que pretendía probar la parte mecánica del vehículo de 2014 de cara a los segundos test de pretemporada (Bahrein).
Bien, en Sakhir estamos y como decíamos hace unas líneas, Lotus nos ha dejado ver el monoplaza más anómalo de la parrilla, y no tanto por la peculiaridad que adorna su nariz, sino porque a día de hoy todavía no comprendo en qué fundamento se apoya para que uno de los soportes del alerón delantero tenga menor longitud que el otro.
Sea como fuere, con nose rara o extrañita, que diría aquél, el E22 utiliza este morro bifurcado para nutrir de aire una zona central del coche en la que destaca un boat muy bien tallado que sirve de preliminar a la parte inferior de unos pontones cuyo torneado y terminación afinada, parecen estar indicados para interferir lo menos posible en el recorrido de los flujos laterales en su búsqueda de la zaga.
En apariencia, el E22 dista poco de su antecesor el E21. No presenta un rake pronunciado y su diseño se antoja que tiene la vista puesta en que los caudales circundantes de la parte central y posterior de la carrocería afecten a la zona terminal desde una posición razonablemente baja.
La abertura en cuña que dejan los soportes en el morro es coherente con este planteamiento: aire trabajando a pocos centímetros del suelo desde la nose al difusor, lo que asegura sobre el papel una buena extracción en el fondo plano y por tanto, la consecución de una downforce bien repartida a lo largo de su longitud.
En líneas generales, el E22 me gusta. Su filosofía parece apuntar a conseguir una buena velocidad punta, de manera que los perfiles que podrían producir mayor drag están bastante pulidos. Las aberturas de aireación en los pontones no se insinúan como excesivas y el tallado de la parte final de los mismos en su unión con el generoso cubrecapot, ayudará sin duda a que los flujos terminales lleguen rápidos a la zaga para extraer desde allí el aire caliente del interior del vehículo y derramarlo sobre la parte superior del difusor.
Salvo por la anomalía nasal, el Lotus de este año comparte planteamiento con muchos de sus rivales. Muy centrado en volúmenes y con una zona final bastante libre de estorbos. Dispone de una batalla golosa que usa en el tren trasero suspensión pull-rod y push-rod en el delantero. Y para finalizar, su diseño frontal se basa en un morro que por un lado resulta practicamente horizontal donde cubre la célula de seguridad, y por otro, declina en forma muy aguda hasta encontrarse con el alerón delantero gracias a dos soportes que de manera todavía inexplicable, adoptan una disposición asimétrica.
Os leo.
2 comentarios:
Hola José.
Lo que han escrito por ahí es que es para cumplir con la normativa, que solo una pequeña superficie puede sobresalir como una punta a x distancia del alerón (como todos los que tienen una punta en el centro.
No he leído la normativa ni me interesa hacerlo, por ejemplo tanto Mercedes como Ferrari no tienen punta, éstos parecen tener ambas soluciones, hueco al centro como M y F y nariz en punta como el resto. Con tal que corra ya podría tener forma de plátano.
Un saludo
Nico
Además de asimétrico por delante, parece ser asimétrico en la trasera también, pues el escape está ligeramente desviado al lado derecho, que es el lado largo de la nose.
Saludos
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