martes, 6 de febrero de 2018

El amanecer de La Fuerza


2018 va a tener poco que ver con la temporada que ha dejado atrás Carlos Sáinz, ni siquiera con las carreras que vistió de amarillo y negro después de haber sido cedido a Enstone por Faenza.

El madrileño llegaba a Renault en el Gran Premio de los USA 2017 para meterse en el habitáculo que dejaba vacante Jolyon Palmer, casi como quien se tira a una piscina. Se embarcaba en un proyecto desconocido hasta entonces, lidiando con Nico Hulkenberg como compañero; todo era nuevo para él, pero a la vez, todo era viejo y ajeno...

Esta temporada que la cosa va a resultar muy diferente. Carlos ha tenido tiempo para integrarse en el programa 2018.

En realidad lleva meses haciéndolo, y de suyo, podemos considerar que el diseño del RS18 le habrá tenido en cuenta, si no en el cómputo total, sí en bastantes parciales ya que se le llamó precisamente para que Renault fuese más fuerte esta próxima campaña. Por tanto, no estamos ante una mera adaptación, como sucedió en octubre, sino ante una colaboración que se pretende provechosa tanto para el patrón como para el currela. Aquello suponía poco más que un puñado de asaltos, lo de ahora suena más a guerra, no sé si me entendéis.

Sáinz es uno de los pilotos que tiene la cabeza mejor puesta sobre los hombros en el paddock y es fácil imaginar que habrá hecho todo lo que estaba en su mano.

Ahora bien, Enstone apunta alto. No tanto como aventuran muchos, pero sí lo suficiente como para encarar a Faenza y su reluciente y todavía no estrenada aventura junto a Honda. Las posiciones arriba están demasiado caras y la lucha que atañe a Renault en 2018 se va centrar en la parte alta de la montonera: Force India, Williams tal vez, nos daríamos con un canto en los dientes si tenemos ahí a McLaren, y por supuesto, la protagonista telonera de esta entrada.

Carlos ya no será el padawan que hemos conocido, le va a tocar fregarse a lo Jedi. En cierto sentido estrena todo, incluso nivel de La Fuerza. Que Dios le proteja y nosotros lo veamos.

Os leo.

3 comentarios:

enrique dijo...

Carlos tiene la oportunidad que tanto ha buscado. Salir de un equipo b y pasar a un equipo factoría es lo que todo piloto desea. Yo creo que lo hará bien. Pero tiene que demostrarme ese nosequé que me haga levantarme de la silla. Ya no hay excusas!!!

Anónimo dijo...

Hola a todos.

Y que haya fiabilidad en el motor, y no como el año pasado, si no, la que nos espera.....

saludos

exray

matador dijo...

Carlos está ante su año de reválida. Llega con los deberes hechos y la lección estudiada desde casa, como los buenos estudiantes. Pero este es el año en el que debe demostrar si puede ser un futuro aspirante al título o solamente un buen piloto, fiel escudero del primer espada, cual Barrichello en los tiempo heroicos de Ferrari. Para ello, tiene que mojarle la oreja a Hulk sí o sí, y no va a ser fácil... En cualquier caso, ya tiene otras dos pesadas misiones asignadas y con las que está cumpliendo, ser el relevo del Mito Alonso, y demostrar que no sólo es el hijo del Matador, y tampoco parecían fáciles.

Salu2!