martes, 19 de marzo de 2019

Diálogos homeopáticos


Pensar por uno mismo se está poniendo tan extremadamente caro que da una pena tremenda comprobar cómo da igual lo que suceda, que en la Fórmula 1 siempre imperará «la verdad oficial», una especie de brebaje homeopático de portentoso efecto placebo que lo mismo sirve para arreglar un roto que un descosido.

Mercedes-Benz sigue imponiendo su ley en 2019, y con lo facilito que resulta echar la vista atrás por ver si hay gato encerrado, la culpa de nuestra actualidad la tienen Ferrari, Renault y Honda, que no han sabido hacer bien las cosas...

El caso es que no han sido tres amigos después de una noche de farra los que nos han contado lo que ha sucedido, los que nos han dicho que no hay misterio y, por tanto, que el bebedizo que nos sirve la prensa y sus adláteres sólo contiene agua y azúcar con algo de colorante. Son el ex Presidente de Ferrari, el jefe del FOM y el responsable deportivo de Honda, y eso sin contar al bueno de Niki.

Luca Cordero de Montezemolo: «Lauda recently confessed to me that Mercedes were already working [on their hybrid engine] since 2007 and that’s why they so adamant during the negotiations to introduce V6 engines from 2014» [Mercedes worked on their F1 engine since 2007].

Bernie Ecclestone: «They knew a bit more about the [proposed] power unit —he is quoted by Italy's Sky Sport 24—, because the Mercedes people were in close contact with the FIA in defining the concept of this engine. It is why they had such a strong start last year and they are keeping that advantage now...» [Mercedes head-started as they knew a bit more].

Yusuke Hasegawa: «Sencillamente no tuvimos el tiempo suficiente. Comenzamos más tarde en comparación con Mercedes y Ferrari. Se rumorea que Mercedes empezó el desarrollo cuatro años antes del inicio de la temporada. Espero que no nos pasemos otros cuatro años, pero necesitamos un poco más de tiempo para ponernos al día.» [Si trabajar con otros no es bueno para McLaren, en Honda no queremos].

Montezemolo señala 2007 como inicio del proyecto de unidad híbrida de Mercedes-Benz. Bernie refuerza la idea de que la de Stuttgart ya estaba trabajando en ello cuando la FIA le echa una manita definiendo conceptos. Y Hasegawa apunta a que en el paddock se rumoreaba que la de la estrella de tres puntas pulía su engendro cuatro años antes de 2014... ¿2009, 2008...? ¡Qué más da!

No hacen falta goniómetros para triangular: si sumamos el Pirelligate de 2013 tenemos una preciosa botellita de laxante químico que se nos continúa vendiendo como un jarabe para la tos, inocuo y sin efectos secundarios. Todo sea porque sigamos creyendo en la excelencia y todas esas otras mandangas que nos permiten soñar que estamos viendo una de Star Wars, en la que todo el mundo ha llegado tarde o se ha equivocado, y en la que Mercedes AMG hace de la más exitosa escudería del mundo mundial porque se lo ha ganado como Dios manda, no como las otras, ¡perezosas, zánganas, incompetentes...!

Y así vamos a por el sexto año de dominio..., tan contentos.

Os leo.

3 comentarios:

Cao Wen Toh dijo...

Mercedes abandona todas las competiciones tras Le Mans 1955, el peor accidente en la historia del automovilismo, tras décadas de dominio en todas ellas. El plan del tito Bernie era demasiado ambicioso: hacer regresar a la de las tres puntas por todo lo alto y así atraer, mediante "efecto llamada", a otros famosos constructores. Bueno, las flechas de plata están, y para quedarse, pero las otras marcas no van a querer participar como meros comparsas de lujo y se dedican a sus cosas. Tanta ayuda a la alemana al final ha pasado factura. Luego que nos cuenten historias o bonitos cuentos; ya estamos en otro lado.

Anónimo dijo...

Por qué condenar a Mercedes por haber alcanzado la excelencia tecnológica? Tienen los mejores mecánicos, ingenieros, recursos, simuladores. Muy buenos pilotos, por qué no decirlo?

La culpa no es de ellos. Tampoco fue de Redbull, ni de Ferrari en sus períodos de dominación. La culpa es de la organización. De los dueños del espectáculo.

Las escuderías son como las Corporaciones. Su único objetivo es crear valor para sus accionistas. Sólo les interesa ganar, a cualquier costo. La Ética, se la pasan por el forro. No es su función mantener la equidad, ni la justicia.

Para eso está la Organización. La FIA, dirección de carrera, Liberty. Ellos son los que llegado el caso, deben lastrar mediante reglamento al que lleva ventajas. Tanto a escuderías, como a pilotos apadrinados por su prensa amiga. Si no lo hacen, ocurre lo que pasa, y la competición deviene primero en espectáculo, y luego acaba en circo. Como hoy día.

Equilibrio Corporación-Estado. Se trata de eso. El problema de fondo es la corrupción.


Jose Tellaetxe Isusi [Orroe] dijo...

Buenas noches, Anónimo ;)

En toda corrupción intevienen dos factores clave: quien corrompe y quien se deja corromper. Yo no demonizo a Mercedes-Benz, sino a los que callan permitiendo que el sistema se prolongue en el tiempo, sabiendo, además, que si la verdad aflorase, a los que corrompen no les saldría a cuenta siquiera intentarlo.

¿Mercedes tramposa o corrupta? Me gusta como argumento, pero que se diga y no se cargue el mochuelo a los que no han tenido situación tan privilegiada. Me parecería lo justo, básicamente porque estamos hablando de «deporte».

Abrazote ;)

Jose