Dentro de nueve días hara dos años de la muerte de Allan Simonsen en las 24 Horas de Le Mans.
Quería recordarlo. Por él y porque el fatal accidente en que perdió la vida el piloto danés, me hizo pensar en lo indestructibles que son los diseños que surgen del concepto mismo de seguridad, frente a lo frágiles que resultan los que lo incorporan a un vehículo de Gran Turismo.
Tenemos suerte...
Os leo.
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