viernes, 9 de mayo de 2014

Hasta la última gota


Juancho Montoya se apartó de la Fórmula 1 porque sentía que tenía que pedir permiso para adelantar y es hora de recordar al colombiano siquiera para que asumamos de una puñetera vez, que no hacemos nada criticando un deporte que ha vuelto la espalda a su tradición, cuando nosotros la pisoteamos a diario.

Fuimos chiquillos, ¿recordáis? Nos acercábamos a las carreras con ojos abiertos, sin depender del Live Timming ni recurrir a los expertos del TL de Twitter, habiendo olvidado lo que dijo nuestro periodista preferido cuando en esa noble profesión había más gente que transmitía auténtica pasión que repartía cartas marcadas antes de una partida.

El Athletic siempre ha podido ganar al Madrid porque San Mamés ruge y el Numancia siempre podrá golear al Barça porque una vez sus jugadores y afición lo hicieron... Nada es imposible. Fernando salía undécimo en Valencia y llegó primero cuando las quinielas daban todo por perdido.

Sí, ya sé que la radio crepita «pon el mapa de ahorro de combustible, esta guerra no va contigo», pero en Barcelona hay gente que ahora mismo necesita sentir que seguimos creyendo en ellos, que cuando salgan a luchar mañana en calificación y el domingo en carrera, no seremos como su jefe y estaremos hombro con hombro a su lado preparados para reír o para llorar porque a pesar de los mantras funestos y los malos augurios que les rodean en estos instantes, nosotros hemos decidido creer asumiendo que si algo sale mal, jamás les dejaremos solos y el lunes veremos por dónde salimos.

Como Juancho, renuncio a pedir permiso a nadie para mantener mi ilusión intacta. Los datos y las estadísticas no me sirven de nada. Este fin de semana jugamos la primera final de las tantas que nos quedan y sé cuál es mi sitio: junto a Kimi, Fernando y el pulpo Mattiacci mientras pongo una vela a la Virgen de Covadonga y otra a la Amatxu de Begoña. Y aviso a los finolis que esto también es deporte como lo era cuando adolescente, me acercaba a las carreras simplemente por sentirme diferente por un rato. Entonces no me hacía falta tanta información como nos ahoga en la actualidad, me bastaba con sentir que era posible aunque pudiese resultar improbable.

¡Forza, forza. Forza! ¡Bebed el veneno de los dioses, los locos y los rebeldes, pero hasta la última gota...!

3 comentarios:

GRING dijo...

Buenos días, Josetxu. Que tengas un excelente fin de semana y esas velas sigan manteniendo tu optimismo "en el candelabro",como decía la otra.Yo estoy tan decepcionado con esta F1/2 que estoy dedicando mi tiempo a cosas más estimulantes, hasta que se produzca una verdadera revolución en la categoría.Como cada fin de semana haré el paripé de ponerme delante de la tele (bueno, si el sol no lo impide) esperando un milagro en forma de competición real en pista. Pero mi vaso está colmado, y hasta que no se vacíe un poco ya no cabe más.Habrá quien diga que la F1 siempre ha sido así, pero yo esperaba otra cosa y me ha saturado saber cómo va a derivar todo un año más:La segunda parte del 2013 tras el golpe de estado de Montmeló y la reacción de tantísimos seguidores que tragan con el alpiste que les echan ha acabado con mi paciencia.Espero que la lectura de "Focus" de Goleman me ayude a recargar pilas y enfocar esto de otra manera. Esta temporada ya decidida apenas ha comenzado me ha agotado. Te seguiré leyendo,porque disfruto con tu literatura y porque la droga hay que dejarla poco a poco. Un saludo y a disfrutar.

Anónimo dijo...

Creo que habrá que poner unas cuantas velas más, muy a mi pesar, porque 1,8 segundos es una distancia absolutamente insalvable. No obstante si alguien me quiere explicar lo de Lotus se lo agradecería. Lo que entiendo de esto es que cada vez entiendo menos.
Un saludo a todos y mucha paciencia.
Alvaro.

J-CAR dijo...

Nos recuerdas la remontada de Fernando en Valencia y me gustaría compararla con la de Seb en Abu Dhabi. ¡Ordago! ¿Será mañana el día de San Sebastián? ¡Vamos, campeón hazlo con este!
https://www.youtube.com/watch?v=LsgdcW14q50

¡Saludos al anfitrión y a los invitados!