Desde el martes pasado me encuentro como sumergido entre dos aguas. Por un lado, ando cansado de sentir que siempre hablo de lo mismo; y por otro, renovado porque he advertido algo que me había pasado desapercibido en esta mi faceta de narrador y fabulador.
Sí, en líneas generales puedo afirmar que estoy bien. De hecho, a las 21:58 de hoy sábado 11 de julio, estaba relativamente bien cuando había salido a la terraza y en el cielo azul pálido del atardecer divisaba una zona en que el tapiz que me amparaba se asemejaba a un papel ligeramente arrugado, difícil de apreciar, pero precioso de adivinar. Vamos, que hace un rato me sentía bien. Y después, un instante después para ser exactos, si no fuera porque la MIR (Paz, ¡jodidos soviéticos!) hace tiempo que se deshizo en mil pedazos al tocar nuestra atmósfera, tras haber utilizado su imagen cernida sobre el horizonte terrestre, el lunes pasado, para declarar unilateralmente el fin del mundo, habría sospechado hoy mismo que una luz solitaria que he percibido sobre el infinito azul era su reflejo haciendo un titánico esfuerzo por resurgir de sus cenizas, sólo para darme las buenas noches. En ese momento me he notado mejor si cabe, cojonudamente, para qué voy a negarlo, porque al fin he sentido sobre mi mejilla izquierda una caricia tibia que andaba esperando y que me traía el anuncio de que a pesar de que juego en clara desventaja contándoos mis cosas cada día, el universo, mi pequeño universo, sigue luchando a brazo partido por recobrar la calma y estabilizarse sin precisar de mi ayuda.
No quiero enrollarme, hoy no. El acto de escribir es en sí una chuminada como la copa de un pino. Vienes, te sientas, y largas lo que te duele o lo que amas, lo que te molesta o lo que sueñas, cualquier bobada o cosa seria, sin pensar en que hay otro que lee, en si le hieres o le levantas el ánimo. Pero descubres que importas algo, mucho, y todo se viene abajo. Si, ahora tengo un miedo que no tenía antes. Vaya por delante que como ángel de la guarda valgo bastante poco, me va mejor el papel de ángel caído, rebelde por saber que Dios me dotó de alas para que supiera lo duro que resultaba el suelo, y ahí ando, levantándome cuando puedo, volando cuando me dejan, y saboreando el polvo cuando no queda otro remedio, y reflexionando siempre sobre si me las quito o me las pongo, sobre para qué sirven realmente. Es jodido esto de escribir, muy jodido.
A menudo maldigo la hora en que se me ocurrió comenzar a hacerlo, por el poder que encierra un acto tan estúpido como pulsar teclas, porque las palabras que surgen resultan dardos envenenados siempre, por lo que dicen, por lo que ocultan, por lo que son, por cómo me salen a veces, a ras de suelo y lento. Algunos colegas dicen que todo esto es bueno, que está bien enfrentarse a los fantasmas cuando resurgen, pero hoy no parecía servir haberlo hecho otras veces, porque sé que podría hacerlo más hueco, más bajo, más hiriente si cabe. Y no voy de farol, tengo páginas escritas que incluso a mí me causan dolor cuando las leo, y es que cuando la presión exterior se acrecienta tiendo a emboscarme en la literatura de mala manera, y a veces no caigo en la cuenta de que andáis por ahí, leyéndome a deshoras, queriéndome a vuestra manera, siempre. ¡Lo siento, aunque la verdad es que no mucho!
Me he tendido en el balancín de IKEA de la terraza, a ver si recobraba las fuerzas mirando el cielo oscuro salpicado de puntitos de luz, admirándome de la cantidad de gaviotas que existen al verlas a cientos en sucesivas bandadas, rompiendo el lienzo estrellado, en formación, buscando alimento, anunciando buen tiempo para mañana, buenos augurios para los que saben leer, susurrándome que no estoy tan solo, que hay un mañana y una nueva forma de hacer las mismas cosas, que siempre hay esperanza, que si no escribo no soy, y que si no soy no sirvo de absolutamente nada.
¿Y Fernando? ¡Ya lo sabéis! El ornitorrinco tiene posibilidades reales. Por desgracia, la ronda de calificación Q2 ha sido un completo desastre debido a la lluvia, pero al final el asturiano ha podido proponer la carga de gasolina y los neumáticos a su entero gusto…
Vale, no cuela y no os lo reprocho, pero dejadme que os cuente que no hay nada como sentirse vivo cuando te dan por muerto. Lo sé porque lo he sentido y aún lo siento. Pero estoy bien, en serio.
8 comentarios:
En mi opinión Fernando se la va a jugar a que llueva mañana. Tiene gasolina para aproximadamente un tercio de carrera y me imagino que habrá puesto bastante carga en el alerón trasero y suavizado un poco los reglajes de suspensión. Así que si llueve Fernando puede que haga unas buenas primeras vueltas; pero no creo que repita lo de Hungria 2006 porque el ornitorrinco por desgracia no se parece al R26 en nada.
Que sepas que somos muchos los que tenemos una fe ilimitada en Fernando; por lo menos aquí en Asturias. Y que somos unos cuantos los que te agradecemos sinceramente el tiempo y la inteligencia que nos dedicas; en estos temas la objetividad no existe y me encanta que no hagas nada para disimularlo.
Un saludo.
Sobre Nurburgring, varias cosas. Una, un reportaje que leí hace algunos meses (o quizás años, no sé) en la otra revista de F1. Hacían un recorrido por el antiguo circuito. Creo que sólo cuesta unos euros. Tengo un amigo que lo hizo en moto y desde entonces tiene parte del pelo blanco.
Ya sé que es una chorrada, pero para intuir levemente de qué va ese circuito, que es demencial, la mejor reproducción que he visto, con baches y todo, es la versión que incluye Gran Turismo 4 para Play Station 2, que se puede correr también en la 3.
Me parece que se tarda como 12 o 14 minutos en hacer una vuelta.
Orroe apunta,hoy gana Massa xD.
Muy filosofica la entrada,te paso algo o es una simple reflexion?
Saludos
me parece que estás en la segunda pierna de una chicana, la hora perfecta para volver a acelerar.
Buenos días ;)
Triske ;) Lamentablemente ni el ornitorrinco es el R26 ni los Bridgestone son los Michelin, pero estoy seguro de que hoy nos vamos a ir a la cama con una sonrisa de oreja a oreja XDDDDD (estoy cruzando los dedos :P)
En cuanto a lo otro, gracias, por este tipo de cosas sigo ;)
Aficionando ;) Correr el Nurbu en el GT4 es una auténtica maravilla larga, larga, muy larga XDDDDD
Yone ;) ¡Pensaba que ya conocías Nurburgring! Para hablar de Webber, de Button o de otras cosas ya hay demasiados sitios, aquí se charla, se reflexiona, y se baila si hace falta :P
Y mi Felipe hoy va a abandonar...
Un abrazo
Jose
F1ALC ;) Recién acabo de subir revoluciones y tengo la mirada clavada en la primera curva esperando a que el semáforo se ponga verde ;)
Un abrazo
Jose
Si con esta entrada querías flagelarte no lo hagas, porque si tú no escribes a mi me matas, si no hieres a nadie con tus palabras o nadie te ama por ellas es que no estás vivo, así que por favor sigue escribiendo como hasta ahora, porque como te digo sino a mi me matas. Te sigo de momento en la oscuridad porque no encuentro la luz, pero de vez en cuando te leo.
Un abrazo muy fuerte amigo mío,
David
Mr Proper, canalla ;) Te echaba de menos.
Y descuida, aquí seguiré durante mucho tiempo, haciendo señales para que sortees los arrecifes y llegues a buen puerto ;)
Un abrazote enorme.
Jose
Publicar un comentario