domingo, 26 de agosto de 2012

Hoy no toca


La posición de Fernando en el campeonato no es tan cómoda como parece. Lleva un puñado de puntos de ventaja sobre sus inmediatos rivales, pero quedan 9 carreras, las mismas que han transcurrido desde que comenzó todo hasta que concluyó el Gran Premio de Alemania. ¡Tela!, como diría aquél.

Amén de la cantidad de kilómetros que supone tanta prueba junta, queda por ahí el asunto de que este año el ovetense no ha tenido que abandonar ni una vez ni ha sufrido un miserable accidente (¡la Vírgen de Covadonga nos proteja de tales coyunturas!), lo que nos pone en que hay por delante mucho territorio en el que puede suceder casi cualquier cosa, que resucite Gerónimo o incluso que Alonso se corone como tricampeón del mundo, uniendo su nombre al de Ayrton Senna, Jackie Stewart, Jack Brabham, Nelson Piquet (el auténtico) y Niki Lauda.

Quiero decir con todo esto, que a pesar de que hay quien ya ha abandonado su asiento porque está todo el pescao vendido, hasta el rabo todo es toro y sería de necios negarles a Hamilton y a Vettel, a Raikkonen y a Webber, si nos ponemos, el mismo escenario optimista que abrí en marzo para nuestro compatriota. Todos ellos tienen coche suficiente como para dar la cara, y la cruz, si se tercia, en aras de defender sus opciones a la corona de laureles que Bernie guarda en el armario ropero de su hija para entregársela sólo a aquellos que la han peleado con uñas y dientes —sí, a él también le gustaba más todo esto cuando no dirigía el cotarro. Os recomiendo a Proust o a Milton para entender de qué va la cosa—.

A lo que iba, que siempre me distraigo en los párrafos largos. Fernando es como una puñetera calculadora y seguro que tiene previsto cómo enfrentarse a esta contingencia, lo que añade pimienta y una pizca de sal al asunto de llegar vivo a noviembre, aunque también aumente el riesgo de pifiarla a la salida de una curva, para que nos entendamos. Vamos, que hay tema de aquí a que termine el campeonato, entre otras cosas porque los chicos de McLaren y Red Bull no se van a quedar quietos ni así los aten, lo que puede llevarnos a disfrutar de un octubre ceñidito en el que al español no le bastará con atender sólo a quien le sigue en la general de pilotos.

En este orden de cosas, hay que admitir que el de Oviedo, hombre de luces, preferirá ir holgado y cómodo tanto como pueda, para llegar a Austin y a Interlagos sin tener que poner velas a ningún santo por aquello de evitar que suceda un Abu Dhabi como el de 2010, esta vez en formato Director’s cut y en tierras lejanas, lo que nos pone en que puede estar abierto a dar un susto a las primeras de cambio, quién sabe si en Spa, por ejemplo, dado que la carrera belga asoma las orejas a la vuelta de la esquina, y entre que agosto pesa como una losa en la F1 así como en los hambrientos aficionados, y que el F2012 parecía en Hungría algo fatigado, la sorpresa, de darse, dejaría noqueado a más de uno, tal vez obligándole a preparar la sesión venidera dejando vacante la lucha por ésta.

Al hilo, Vettel y Hamilton, por encima de Webber y Raikkonen, van a tener que encomendarse a Javi Clemente y apretar los dientes para aplicar sobre el asfalto el bíblico patadón y p’alante con el que el Athetic se medía incluso al Real Madrid y al Barça, porque como dejen al galgo asturiano alejarse tan sólo un poco, a lo peor tienen que pensar en ir haciendo el petate antes de tiempo, y es que esto es F1, no sé si en estado puro o no, pero F1 al fin y al cabo, y en sus entrañas, salvo que domine la de la bebida energética o la que se apellidaba como Ross, un día llueve y otro, sol; otro te levantas dirigiendo el cotarro, y al siguiente te tienes que abrir paso a codazos.

Tal vez lo que nos está pasando es que habíamos perdido la costumbre, o no, quién sabe, de tener que asistir a un campeonato en el que todavía no hay nada decidido porque quedan muchos puntos por disputar, en el que no hace falta rezar el rosario o hacer promesas para que suceda un milagro, porque éste está sucediendo delante de nuestras mismas narices aunque no sepamos reconocerlo. Siéntense de nuevo, por favor, ya habrá tiempo para levantarse y apagar el televisor o para abandonar la grada, pero hoy no toca porque juraría que la cosa está la mar de entretenida.

1 comentario:

csm dijo...

Pues mira, yo creo que lo que toca es tener un buen previo de Spa, (el mejor escenario para retomar la F1 después del parón veraniego), ver una pedazo de qualy el sábado y un carrerón el domingo y...lo que luego tenga que venir, ya se verá. Pero toca, ya toca disfrutar con los coches y si es con Fernando arriba.-..ni te cuento!
Un besote