Antes de nada, deciros que no me organiza la agenda ni Leo Turrini ni Luca Cordero di Montezemolo y sus montajes, de forma que siguiendo mi guión particular y con vuestro permiso, voy a centrarme en la entrada que tenía previsto publicar esta tarde, no sea que con tanto cabestro como anda suelto, por exceso de noticias reseñables acabe por dejarla sin escribir.
Y es que sí, hoy tocaba referirme a ese feo asunto que trajo a colación Tadeo la noche del domingo, acerca de la posibilidad de que el juez de la horca, nuestro cachondo Charlie, hubiera temblado primero a la hora sacar a Maylander de su agujero por el asuntico de nada por el cual, Adrian dejaba clavado y calado su Sauber a la entrada de la recta de tribunas de Hockenheim, ocupando para más bemoles la mitad de la pista, y luego, tras echar las pertinentes cuentas, decidía que la seguridad de todos los participantes importaba bastante menos que el triunfo de Nico en casa.
A saber, dos puntos, que diría aquél. Independientemente de que opine que Mercedes AMG no habría estado por la labor de empañar el regalo de bodas al hijo del gran Keke dejando que Lewis se subiera al primer cajón del podio, en el fondo estamos ante una cuestión de matices y por ello debo confesar que estoy plenamente de acuerdo con mi compañero en que fuera cual fuese el desenlace si el Safety Car hubiera hecho su trabajo, la asombrosa mano del protagonista de este texto, anduvo por allí metida en uno de sus característicos sí es no es con que acaba manchando todo lo que toca.
Dicho lo cual, puesto que en este mismo blog, desde que el tiempo es tiempo, para más señas, me he hartado de señalar el cochecito de Bernd como uno de los juguetes preferidos de Whiting a la hora de maquillar y retocar las carreras, me atrevo a decir que una vez más, estamos venciendo.
Sí, lo estamos haciendo porque desde 2007 hasta que irrumpió el DRS, la cosa esa de señalar la posibilidad de que Charlie fuese tremendamente parcial con el uso que daba al Safety Car parecía de locos y hoy, cualquiera con dos dedos de frente entrevió algo sumamente raro en lo sucedido con Sutil en Alemania.
Reconozco que siguen siendo tiempos duros pero os juro que de un tiempo a esta parte, percibo cómo los que defendían a capa y espada desde sus respectivas tribunas la incuestionable imparcialidad de los jueces de este deporte, los que tachaban poco menos que de impresentables a quienes osaban insinuar que había tema, han comenzado lentamente a plegar velas para arrimarse a un sentir general que no ceja un instante en hacerse preguntas tales como: ¿por qué coño Charlie reaccionó conforme a reglamento, activando a Maylander, cuando Sebastian aparcó su RB9 en Silverstone el año pasado; y por qué ante un supuesto mucho más grave, decidía el domingo pasado por sus santos cojones, que media docena de comisarios y los pilotos que quedaban en pista, se podían jugar alegre y literalmente la vida?
En serio, ¿tan importante era que Nico ganase en su tierra?
Y es que sí, hoy tocaba referirme a ese feo asunto que trajo a colación Tadeo la noche del domingo, acerca de la posibilidad de que el juez de la horca, nuestro cachondo Charlie, hubiera temblado primero a la hora sacar a Maylander de su agujero por el asuntico de nada por el cual, Adrian dejaba clavado y calado su Sauber a la entrada de la recta de tribunas de Hockenheim, ocupando para más bemoles la mitad de la pista, y luego, tras echar las pertinentes cuentas, decidía que la seguridad de todos los participantes importaba bastante menos que el triunfo de Nico en casa.
A saber, dos puntos, que diría aquél. Independientemente de que opine que Mercedes AMG no habría estado por la labor de empañar el regalo de bodas al hijo del gran Keke dejando que Lewis se subiera al primer cajón del podio, en el fondo estamos ante una cuestión de matices y por ello debo confesar que estoy plenamente de acuerdo con mi compañero en que fuera cual fuese el desenlace si el Safety Car hubiera hecho su trabajo, la asombrosa mano del protagonista de este texto, anduvo por allí metida en uno de sus característicos sí es no es con que acaba manchando todo lo que toca.
Dicho lo cual, puesto que en este mismo blog, desde que el tiempo es tiempo, para más señas, me he hartado de señalar el cochecito de Bernd como uno de los juguetes preferidos de Whiting a la hora de maquillar y retocar las carreras, me atrevo a decir que una vez más, estamos venciendo.
Sí, lo estamos haciendo porque desde 2007 hasta que irrumpió el DRS, la cosa esa de señalar la posibilidad de que Charlie fuese tremendamente parcial con el uso que daba al Safety Car parecía de locos y hoy, cualquiera con dos dedos de frente entrevió algo sumamente raro en lo sucedido con Sutil en Alemania.
Reconozco que siguen siendo tiempos duros pero os juro que de un tiempo a esta parte, percibo cómo los que defendían a capa y espada desde sus respectivas tribunas la incuestionable imparcialidad de los jueces de este deporte, los que tachaban poco menos que de impresentables a quienes osaban insinuar que había tema, han comenzado lentamente a plegar velas para arrimarse a un sentir general que no ceja un instante en hacerse preguntas tales como: ¿por qué coño Charlie reaccionó conforme a reglamento, activando a Maylander, cuando Sebastian aparcó su RB9 en Silverstone el año pasado; y por qué ante un supuesto mucho más grave, decidía el domingo pasado por sus santos cojones, que media docena de comisarios y los pilotos que quedaban en pista, se podían jugar alegre y literalmente la vida?
En serio, ¿tan importante era que Nico ganase en su tierra?
Cada vez se van viendo más grandes los costurones.
ResponderEliminarKing Crimson
Cualquiera que estuviese viendo la carrera se llevó las manos a la cabeza al ver que no entraba el Safety Car mientras los comisarios se jugaban el tipo entrando en la pista...me da arcadas ya ver solo la cara del mamarracho ese británico, el mismo que alcanzaba un orgasmo señalando aquel dia a Alonso con el dedito porque se adelantó al semáforo en la salida...
ResponderEliminarCaramba, influir en Orroe y que escriba un texto después de leer una opinión mía se me antoja un honor, y si alguien no opina igual, pues que le den.
ResponderEliminarMe has alegrado el día, a pesar de la corrupción deportiva, que una vez más, destapas.
Y como bien dices, de estas ya nos sabemos unas cuantas.
Saludos
Encima de parcial hay que tildarlo de inepto. Porque este año en Le Mans probaron un nuevo sistema de seguridad que se llama slow zone. Basicamente consiste en pasar con el limitador de velocidad por la zona donde se ha producido un incidente. No entiendo porqué su uso no se ha implantado en todas las carreras de circuitos de nivel. Con una slow zone hubiera podido retirar el Sauber con seguridad, manteniendo las diferencias que cada piloto se había ganado. Un saludo.
ResponderEliminarRealmente dudo que el motivo fuese darle la victoria a Nico. Pudieron haber sancionado a Hamilton mucho antes por animal y cargarse la carrera, entre otros, de Raikkonen.
ResponderEliminarEntonces Chema asumes que debió sacar el safety car, pero no lo sacó.
ResponderEliminarDices que no crees que fuera por Nico, ¿cual fue entonces la razón según tu opinión?
El primer error es que nos creemos que la f1 es un deporte con sus reglas claras, sus jueces imparciales y con todos en igualdad de condiciones :)
ResponderEliminarAunque me duele reconocerlo cada se ve parece más al wrestler. Con sus buenos, sus malos y sus este tiene que ganar porque es bueno para el negocio...