Dicen los sabios que hay mil maneras de morir, metafóricamente hablando, se entiende, incluso de éxito, pero seguro que ninguna de ellas fue contemplada por la maquinaria de vender latas de brebaje cuando adquirió el A1-Ring, para convertirlo en el flamante Red Bull Ring que acogerá desde mañana mismo el Gran Premio de Austria, en lo que supone su retorno al calendario oficial del Mundial de Fórmula 1.
Hace tiempo que no hablo de la de Milton Keynes sin atender a sus detalles, sin atomizarla, vamos, y aunque la fotografía que abre esta entrada corresponde al Gran Premio de EE.UU. del año pasado, la traigo a colación primero de todo porque la guardé en su momento para utilizarla en un futuro imposible de prever hace tan solo unos meses, el de las inevitables horas bajas; y segundo, porque trasciende lo meramente deportivo para mostrarnos que más allá de la victoria o la derrota, detrás de todo logro o mordida de polvo hay personas capaces de comportarse como auténticos párvulos a la hora del recreo.
Siendo honesto, confieso que daría lo mismo que la estampa recogiera aquella simulación de pelea que mantuvieron Lewis y Nico tras la disputa del Gran Premio de Bahrein para que a la postre, anden ahora mismo poco menos que sin poder mirarse a la cara y con la mano derecha acariciando las cachas de sus respectivos revólveres, porque el pecado es común a todo el paddock y así, quien no se pone hilarante, llora en algún momento mostrándose tal cual es, sin máscaras, ebrio de euforia o con la bilis devorándole las entretelas.
Pero volvamos a la demontre fotografía y al instante que recoge: el enésimo triunfo de una escuadra por entonces imbatible, que miraba el horizonte con la alegría propia de los héroes y también, por qué no decirlo, con su frágil ingenuidad.
Estuvo bien batir a Ferrari en su feudo y arrasar sobre lo divino y humano sin ningún tipo de contemplaciones. Todo iba bien, acaso demasiado bien para no resultar extraño, y el año próximo, este que estamos transitando, Red Bull estrenaría fortaleza que defender, un lugar donde vencer de nuevo o acaso exponerse públicamente a morder el polvo ante los suyos, en el corazón de Austria.
El momento ha llegado y la de Milton Keynes toma posesión de su bastión en Spielberg en horas relativamente oscuras, para enfrentrase a la hoy por hoy todopoderosa e inalcanzable Mercedes AMG y a una Ferrari que se quiera o no, no está tan lejos como desearía la austriaca. Y haciendo gala de que no tenía previsto que fuera así, de que tal vez le pudo la arrogancia cuando compró castillo, lleva un tiempo dando feas muestras de lo que jamás hay que hacer en Fórmula 1 o en cualquier otro sitio, cuando se ejerce de anfitrión.
En todo caso y como mencionaba al comienzo, conviene no olvidar nunca que también se puede morir de éxito cuando este te estalla en la cara.
Os leo.
Os leo.
RBR siempre ha tenido malas formas, solo hay que recordar como ha ido tratando a todos sus proveedores, pero la pelea del castillo de Schloss Gabelhofen me parece tan simulada como la de Nico y Lewis después y durante el GP de Bahrein.
ResponderEliminarPor ejemplo el año pasado Mercedes se puso del lado de la FIA, y RBR del lado de la FOM, y ambos consiguieron que Pirelli les sacara las castañas del fuego.
Este año el enfrentamiento FIA-FOM se ha exacerbado, paralelamente los cruces de declaraciones entre Mercedes y RBR son todo un espectáculo. Bernie empezó la temporada con aquellos titulares incendiarios de Jerez a los que pronto se sumaron sus voceros, los amiguetes que dependen de él para seguir teniendo una carrera (¿que fue de la tan anunciada denuncia de los circuitos?) y hasta el propio romperecords insistiría en múltiples declaraciones. RBR pedía una revisión del reglamento técnico y Mercedes defendía el establishment. Mientras crecía el sonido de los tambores todo el mundo se sentía obligado a tomar partido.
Hasta consiguieron sacar de su retiro a Monty, y tras sonoras declaraciones en las que parecía un portavoz de RBR el "espectacular" GP de Bahrein le dejó en el más absoluto de los ridículos. Si lo remiramos vemos aparentes luchas entre compañeros de equipo,los motorizados por Mercedes y los de RBR. ¿Curioso?
Continuaron haciendo ruido sobre el asunto del ruido y Mercedes les hizo un pedorreta trompetera en Barcelona. Después siguió con las disputas y amistades entre sus hijosdeputa para que la peña se olvidara del tema. Cuando la humedad de Spielberg amortigüe los decibelios saldrá alguien de RBR a recordarnoslo.
¿Y que estarían consiguiendo este año? Pues no lo se. Pero las traseras del W05 y del RB10 son inexplicadamente las más estables en los circuitos, y con este reglamento técnico me parece muy muy difícil de explicar. Tanto como nos decías el 11 de Junio en "¿Quien le pone el cascabel al gato?" Demasiado rápido para tener cascado el MGU-K y demasiado lento para poder impedir la primera victoria de RBR justo antes de estrenar su nueva casa.
¿Tendremos por fin el Anschluss o seguiremos con el juego de trileros?
¡Vigilen sus carteras!
Muy buenos días, J-Car ;)
ResponderEliminarSí, este año estamos especialmente a dos velas y con demasiado ruido ambiental, y si honestamente te podría decir que solo tengo respuesta para lo de las zagas estables, en el fondo esa explicación revisa y aclara el resto, así que vayamos con ello XDD
Porque la primera gran mentira, como ya hemos comentado en otras ocasiones pasadas, alude a que se de desterraba la aerodinámica o al menos se mitigaba, ya que con el grueso del calendario oficial abastecido por circuitos firmados por el binomio Tilke/FIA (es ella la que delimita el área de influencia y los márgenes del artista), la aero no se puede eliminar porque se caería el tinglado.
Dicho esto, aunque resulte redundante, las Pirelli lo explican todo y aunque también dijimos, creo que en China, que eran igual de mierda para todos y que eso en sí ya era bueno XDDDD, como bien mencionabas el otro día, para Singapur habrá que comprar toneladas de palomitas XDDDD
Ahora en serio, las prestaciones de las gomas están en el déficit de velocidad y de rendimiento y es curioso que Nico se cagara literalmente de miedo en Abu Dhabi durante las pruebas de diciembre, cuando lo del reventón, y la respuesta de la fábrica italiana haya sido cogérsela con papel de fumar para hacer palidecer de envidia en dureza a las Bridgestone de 2010.
Las zagas de los coches con más compromiso aerodinámico (RBR y Mercedes) son estables porque admiten suspensiones más duras que sus rivales gracias a que los compuestos son a su vez, auténticas piedras.
Hecha la ley, hecha la trampa. Se monta suficiente ruido alrededor para que nadie mire al lado correcto —curiosamente ni Milton Keynes ni Brackley se han quejado todavía de las Pirelli—, y se vende como ventaja mecánica lo que es vulgar y ramplona ventaja aerodinámica.
También lo dijimos, cuando aludíamos al desinfle de Adrian y al poderío de Mercedes AMG, pero los trileros nos ganan en número, J-Car ;)
Y si no creo en la victoria en casa de RBR, es porque las exigencias del Red Bull Ring van a poner a prueba la consistencia del motor Renault y Ricciardo debe morir, metafóricamente hablando, como en las tragedias, como a punto estuvo de hacerlo en Mónaco y bien señalaste. En todo caso, esta pantomima necesita urgentemente un nuevo guión y unas nuevas ruedas ;)
Un abrazote
Jose