Proa al viento [Haas]

No hemos llegado al ecuador de la temporada, pero como difícilmente podemos dividir en dos el Gran Premio de Bélgica y va siendo hora de repasar qué tal van nuestras escuderías del alma, vamos a ello toda vez que la pretemporada oficial terminó en marzo aunque la realmente válida lo hizo el pasado Gran Premio de Francia. 

Y bien, ha llovido lo suyo desde que hicimos nuestros pronósticos [#2021] pero para Haas parece que el tiempo se ha congelado, cosa de todo punto normal cuando, en realidad, no hay nada por aquí ni por allá, salvo un vehículo superado por los acontecimentos y la normativa vigente, impasible el ademán, impermeable a los neumáticos y al corte en el fondo plano, que está sirviendo únicamente para que Nikita y Mick sumen kilómetros en formación de combate, y eso cuando pueden concluir una carrera.

Lo cierto es que ya nos habían avisado y, en este sentido, cabe muy poquito de qué quejarse porque Haas transita 2021 a la espera de que llegue 2022 —uno nunca sabe si esto es bueno o malo—, de manera que después de Hungaroring la norteamericana está donde se esperaba que estuviese: en el último lugar de la tabla de Constructores con 0 puntos [Toy car (Haas)].

El nuevo pronóstico no mejora el anterior sino que lo empeora. Con la necesidad apremiante de centrarse en el monoplaza del año que viene y las arcas de la calderilla abundando en telarañas, resulta complicado imaginar algún tipo de evolución para el VF-20 que saque al equipo del fondo de la parrilla. Sea como fuere, ya que lo importante es participar, ahí tenemos a la de Kannapolis demostrando que si se quiere se puede, o eso, que algo ganarán, digo yo.

En fin, hemos hecho pleno en este caso pero hay que decirlo con la boca chica porque ésta era realmente facilona.

Os leo.