El gigante Audi ha decidido abandonar el DTM (Deutsche Tourenwagen Masters) a finales de esta temporada.
La excusa oficial se apoya tanto en los retrasos acumulados a cuenta del coronavirus en el inicio de la actual campaña como en un horizonte competitivo que no compensa a la de Ingolstad. Como telón de fondo: la deriva del sector automotriz hacia las energías limpias, razón por la cual la alemana ha apostado fuerte por la Formula E, y, por qué no decirlo, los coletazos del Dieselgate, que han originado que la Comunidad Europea haya endurecido su legislación desde el pasado 1 de enero [Volkswagen, el grupo más castigado por la nueva normativa de CO2].
La excusa oficial se apoya tanto en los retrasos acumulados a cuenta del coronavirus en el inicio de la actual campaña como en un horizonte competitivo que no compensa a la de Ingolstad. Como telón de fondo: la deriva del sector automotriz hacia las energías limpias, razón por la cual la alemana ha apostado fuerte por la Formula E, y, por qué no decirlo, los coletazos del Dieselgate, que han originado que la Comunidad Europea haya endurecido su legislación desde el pasado 1 de enero [Volkswagen, el grupo más castigado por la nueva normativa de CO2].
Audi pertenece al grupo VAG (Volkswagen Aktiengesellschaft), y no parece descabellado pensar que la razón última de la decisión esté precisamente en este punto, ya que una parte importante de su catálogo de alta gama está enfocado a la energía eléctrica y, en este sentido, competir en certámenes contaminantes no resulta adecuado para su posicionamiento de mercado.
Pero no nos distraigamos. El DTM queda muy cojo con la salida de la marca de los cuatro aros. Mercedes-Benz lo abandonó al finalizar 2018, doce meses después la seguía Aston Martin (R-Motorsport Aston Martin) y ahora le ha tocado el turno a Audi, de forma que para 2021 sólo BMW competirá como equipo de fábrica en el Alemán de Turismos, y aquí viene donde la matan, ya que ésta es una situación que dinamita las expectativas depositadas por el ITR (Internationale Tourenwagen-Rennen) a la hora de ampliar la parrilla de participantes y el elenco de fábricas con el fin de revitalizar el DTM.
Os leo.
Pero no nos distraigamos. El DTM queda muy cojo con la salida de la marca de los cuatro aros. Mercedes-Benz lo abandonó al finalizar 2018, doce meses después la seguía Aston Martin (R-Motorsport Aston Martin) y ahora le ha tocado el turno a Audi, de forma que para 2021 sólo BMW competirá como equipo de fábrica en el Alemán de Turismos, y aquí viene donde la matan, ya que ésta es una situación que dinamita las expectativas depositadas por el ITR (Internationale Tourenwagen-Rennen) a la hora de ampliar la parrilla de participantes y el elenco de fábricas con el fin de revitalizar el DTM.
Os leo.
Lo más difícil sea quizás que no hay luz que otro fabricante alemán, por ejemplo Porsche, ingrese a la categoría.
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