Definitivamente herr doktor Marko perdió una bonita oportunidad de mantener la boca cerrada cuando habló de contrarrestar el alarmismo de los políticos y no apoyar sus decisiones, de pensar positivamente y entender que las pruebas del calendario se van a desarrollar sin problemas y que en Melbourne la cosa parecía bastante normal... [Red Bull boss Helmut Marko makes shock coronavirus claim ahead of Australian GP], eso, o es más incauto de lo que cabría pensar, por no decir otra cosa.
La Formula E se ha tomado un respiro de dos meses, la NBA acaba de suspender indefinidamente su liga, y el WEC cancela las 1000 Millas de Sebring, que se iban a celebrar el próximo día 20, después de que USA haya extendido el cierre de fronteras a los ciudadanos de todos los países que en estos momentos están siendo azotados por el coronavirus...
Las noticias desde Albert Park tampoco son halagüeñas. Hay al menos doce componentes del paddock bajo observación por haber presentado síntomas, y algunos pilotos hablan sin paños tibios de que están preparados por si hay que volver a casa [Carlos Sainz admet son inquiétude face à la propagation du coronavirus]. Y como telón de fondo, la necesidad australiana de sacar la cabeza después de los incendios que han destrozado su economía, una Liberty Media a mi modo de ver demasiado bisoña ante los acontecimientos, un Jean Todt que vuelve a demostrar que la FIA no es locomotora sino vagón de cola, y gente como Helmut Marko hablando más de la cuenta. ¿Quién da más?
Os leo.
Esto está feo, José. Eso sí, mantengo mis sospechas, conspiranóicas, tal vez, pero algo me dice piensa mal y acertarás.
ResponderEliminarEs evidente que estamos en problemas, todos, la humanidad toda.
ResponderEliminarPero respecto de Marko, qué curiosidad, sus declaraciones lo pintan de cuerpo entero y a la vez lo dejan desnudo...
Saludos desde el Coño Sur.;)