Con el título «Ma Qinghua vuelve a la Fórmula 1 en el Gran Premio de China», hace casi seis años hablaba en mi espacio de Diariomotor sobre la trayectoria de un joven piloto chino que buscaba labrarse nombre y fortuna en nuestra disciplina. No ha llovido ni'ná, que decía aquél, pero hoy, día de los Santos Inocentes, me apetecía inaugurar la jornada recordando a uno de los exponentes de esa hornada de polillas que siempre acaban quemadas por acercarse demasiado a las luces de nuestro deporte...
El piloto chino Ma Qinghua (Ma Qing Hua o Qinghua Ma), conocido por el público español porque el año pasado estuvo integrado en el organigrama de HRT junto a Dani Clos (Programa de Jóvenes Pilotos de HRT F1 Team), ha participado esta mañana en la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de China, a bordo de un CT03 de la escudería de Leafield, Caterham, equipo en el que milita este año desempeñando su labor deportiva en las GP2 Series.
Qinghua, quien nació precisamente en Shanghai a finales de 1987 (25 de diciembre), es una joven promesa del automovilismo asíatico que forma parte de esa apertura de China al mundo occidental, a sus usos y costumbres, que sitúa al gigante asiático como un firme candidato a convertirse en la primera potencia mundial, si no lo es ya, y cuyo nombre no podía faltar en una cita como el Gran Premio de China, que sirve de aperitivo a la cercana celebración del Salón del Automóvil de Shanghai (Auto Shanghai), bienal del motor que abrirá sus puertas desde el próximo día 21 hasta el 29 del corriente.
El piloto chino debutó oficialmente en Fórmula 1 en la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Italia del año pasado (7 de semptiembre de 2012), sustituyendo en los mismos a Narain Karthikeyan al volante del F112 tras haber obtenido la superlicencia FIA y haber completado el exhaustivo programa que HRT diseñó exclusivamente para él.
Durante los entrenamientos del Gran Premio de los USA (16 de noviembre de 2012) volvió a subirse al F112 y otra vez lo hacía ocupando el habitáculo del coche número 23, aunque en esta ocasión lo hizo sabiendo que su futuro era incierto, pues la española HRT había anunciado su retirada del Mundial de Fórmula 1 para 2013, por problemas financieros.
El final del otoño y comienzo del invierno de 2012, supusieron para Ma Qinghua y su entorno inmediato un episodio de trabajo contrarreloj para encontrar un puesto que asegurara al joven la continuidad necesaria para seguir desarrollando su incipiente carrera profesional.
Entre rumores que aludían a negociaciones con Marussia y con Caterham, al final fue esta última la que propuso las mejores condiciones y el joven piloto se integraba en el programa de Caterham Racing en GP2, campeonato que el de Shanghai está disputando con vistas a acumular la mayor cantidad de experiencia posible de cara a un posible asalto a uno de los asientos como probador en la de Leafield para el año próximo, siempre y cuando ésta supere el difícil momento económico que está atravesando.
Sea como fuere, Ma Quinghua, quien ya atesora una bonita cantidad de kilómetros sobre circuitos y destacó, así mismo, en las Pruebas para jóvenes pilotos de Silverstone (10 a 12 de julio de 2012) aunque tuvo que ceder el habítaculo prestado de su HRT a Dani Clos en las celebradas en Abu Dhabi el mismo año (15 a 17 de noviembre), se estrenaba esta temporada a bordo, como decíamos, de un CT03 de Caterham y precisamente hoy.
Si bien ha quedado último en la tabla de tiempos de la primera sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de China, con un discreto 1’43”545, muy alejado del crono conseguido por su compañero Giedo Van der Garde (1’42”083), Quinghua ha podido disfrutar en su sustitución de Charles Pic, de un generoso espacio que a buen seguro le habrá permitido convertirse en la noticia deportiva del día en Shanghai, su ciudad natal, consiguiendo de paso subir un peldaño en esa otra carrera que corren todos los pilotos noveles: conseguir patrocinadores para poder llamar a las puertas de la Fórmula 1.
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