¿Y Massa qué, cuántas veces se ha retirado?

Donde te lleve tu Montero hace mucho que no ha llegado nadie... Así rezaba el eslogan de un anuncio publicitario de Mitsubishi España que proponía los siguiente: propietario de vehículo de la marca nipona llega tan lejos que topa con un cabrero que en 1997 pregunta: ¿y el Madrid qué, otra vez campeón de Europa? o ¿y Franco qué opina de esto...?

El dictador había fallecido en 1975 y el Real Madrid no era campeón ni lo había sido recientemente, acumulaba treinta y un años de sequía europea aunque la situación se iba a resolver antes de lo que maginaban los guionistas del spot, con Jupp Heynckes como entrenador (1998). En todo caso, que es a lo que vamos, para los espectadores de entonces tenía pleno sentido aquella mezcla de ingenuidad, fechas mal colocadas y aspiraciones fuera de tiempo y hora: ciertamente, donde llegaba el 4X4 japonés hacía mucho que no llegaba nadie...

Pusimos nombre al protagonista y supimos mucho después que don Jesús García Velasco nos había abandonado para siempre tras habernos regalado una de esas piezas irrepetibles que sólo entendemos los que tenemos cierta edad, que obviamente, únicamente sirve como chiste para algunos de nosotros.

Asumo el riesgo de que una buena cuota de aficionados no entiendan de qué va esta historia, pero en leyendo que mi Felipe por fin deja la Fórmula 1, no he podido por menos que recordar al cabrero de Majaelrayo: ¿Y Massa qué, cuántas veces se ha retirado?

Mi Felipe es el hombre que se retira siempre y nunca lo hace. Sólo ha sucedido una vez pero tanto da, su ahínco en sobrevivirse a sí mismo lo ha convertido durante 2017 en una especie de secuencia mala de tomas falsas con las que algunas películas nos alegran la vida al final de la cinta, después de los créditos o mientras tanto. 

Sin duda sobraba esta temporada en la dilatada carrera del paulista, pero puesto que se hizo imprescindible sirviendo de excusa necesaria al patrocinador principal de Williams y 2018 será la primera sesión en muchos años en que no habrá presencia brasileña, pienso inevitablemente que alguien puede tener la ocurrencia de reciclarlo de nuevo por aquello de impedir que Brasil se quede sin pilotos en la máxima disciplina. 

Felipe no parece tener ganas de dejarlo del todo. Se le nota renuente. Le faltaba convicción en su mensaje de despedida... No sé, a lo peor está amagando y descubrimos en diciembre que ha firmado por Haas o por Sauber. ¿Vete tú a saber?

Os leo.