Para nosotros resulta mucho más sencillo retocar la historia: los cuatro Magos de Oriente. Zak, the fourth King, por ejemplo. Los british lo tienen más jodido, Santa y Zak hacen mala pareja en unas Navidades y, seguramente, para los chiquillos supondría un soberano susto encontrarse al hazañoso norteamericano compartiendo escena con el San Nicolás de toda la vida.
En fin, el zakbrownismo, como corriente de pensamiento, ha calado entre nosotros y no tiene visos de querer abandonarnos.
No está mal, entendedme. Que el californiano sea responsable de todo lo bueno y maravilloso que sucede en McLaren allana el camino para encontrar responsabilidades cuando algo empiece a fallar, Dios no lo quiera. En todo caso, hay cositas como que no...
Fernando daba el banderazo de salida de las 24 Horas de Le Mans 2014, conducía un 512 coda lunga para deleite del respetable en los eventos que rodearon aquella edición, y hasta don Luca Cordero di Montezemolo se atrevía a sopesar el desembarco de Maranello en la mítica prueba de resistencia francesa, no antes de 2020 [Ferrari piensa en Le Mans].
Al año siguiente, 2015, Alonso, ya en McLaren, muestra su interés por disputar la carrera más larga del mundo [Alonso quiere correr las 24 horas de Le Mans en 2015], pero sus compromisos con Ron Dennis y Honda lo inclinan a dejarlo para más tarde. En 2016 Bernie mueve ficha y solapa el Gran Premio de Europa (Azerbaiyán) con la disputa gala, lo que impide que Nico Hulkenberg pueda repetir victoria (ganó en 2015 sobre un Porsche 919 Hybrid, en compañía de Nick Tandy y Earl Bamber) y que el asturiano intente su primer asalto a La Triple Corona en un año en que la prensa internacional le está enseñando la puerta de salida.
Ya sé que Fernando siempre se equivoca pero es necesario recordar, también, que hay mucho protagonista suelto por ahí que ha hecho lo imposible para que yerre en sus decisiones.
El caso es que en 2016 este tipo de movimientos periféricos no importan ya que Ron Dennis, sí, el viejo Ron, ha dado su placem para que el asturiano disfrute de su golosina en 2018. Por concretar: en la primavera de 2016 McLaren ha aceptado que si renueva, su piloto número 1 disputará las 24 Horas de Le Mans de este próximo año.
Es importante la secuencia de hechos, y las fechas, porque Brown llega a Woking a finales de 2016 [En Inglaterra sitúan a Zak Brown como favorito para suplir a Dennis], y de suyo, toma las riendas de la inglesa sabiendo que llegado el momento, una de las condiciones para seguir contando con Alonso será dejarle mano libre para que aborde Le Mans.
Huelga decir que el instante ya está aquí. El zakbrownismo nos cuenta que el cuarto Rey Mago ha puesto delante del de Oviedo una zanahoria irrechazable, pero la realidad invita a pensar que es Fernando el que dispone de ese as en la manga porque lo peleó con Ron Dennis en 2016. Es decir: Alonso es quien pone las condiciones ahora, no es Zak Brown quien trae los regalos.
La única pega que veo al negocio de Le Mans 2018 es que se prevé muy descafeinada solo con los Toyota en LMP1. Solo tienen que llevar una unidad a meta para ganar.
ResponderEliminar¡Ojo¡ que Le Mans nunca es fácil y es muy traicionera con quienes osan retarla El llevar un LMP1 no garantiza ganarla.
ResponderEliminarRecuerden esa maravillosa edición del 95 en la que cayeron todos los oficialisimos y ganó aquel bellisimo Mclaren F1 negro.
https://en.wikipedia.org/wiki/1995_24_Hours_of_Le_Mans
Y en los otros dos Toyota LMP1 no va a haber pilotos mancos precisamente...
Que gran entrada, como siempre dándole la vuelta a lo que creíamos saber. Menos mal que nos ilumina tu foco en estos días oscuros de la información.
ResponderEliminarSaludos
A mi me da la sensación que el CEO de McLaren es Fernando. Es lo más valioso que tiene la inglesa ahora mismo.
ResponderEliminarAlea jacta est para Ferrari. Habemus campeón gracias a Vettel, el mejor aliado para Mercedes.
ResponderEliminarKing Crimson