Está visto que Mercedes AMG tendrá que esperar al menos hasta mañana.
Haciendo el repasillo nocturno después de recuperar a trancas y barrancas el ritmo perdido el miércoles pasado, me encuentro con que hay 65 pilotos de karting que se niegan a correr en el circuito de La Morgal si no se mejoran las medidas de seguridad que ha dado por buenas la real RFEA, y lo primero que pienso es que sus padres son una pandilla de irresponsables.
Yo, que me he ciscado aquí mismo de los que llamaban nenazas a los pilotos de Fórmula 1 porque no disputan carreras bajo aguaceros, que he tratado de hacer ver por qué no es seguro hacerlo, me siento con fuerzas para tildar de impresentables a todos aquellos que sabiendo lo peligroso que resulta todo esto tasan el que sus vástagos se jueguen la vida a que alguien, arriba, haga este deporte un poquito más seguro, por ver si hay suerte, en una palabra, que ya hemos visto con Gonzalo que a veces no es así.
Jules Bianchi era mayor de edad cuando sucedió la fatalidad que se lo llevó por delante en Suzuka, pero en este asunto estamos hablando de menores, de chiquillos que corren porque alguien mayor que ellos asume los riesgos, o se supone que los asume, y aquí, sólo cabe tildar de negligente a quien temiendo que la actividad que desarrolla su hijo pueda resultarle gravemente perjudicial, le consiente disputar una carrera o un campeonato confiando en que la altura o el ángulo de un piano se modifique para permitir un mejor paso por curva.
Si yo tuviese la mínima duda no dejaría competir a mi hijo, así os lo digo. Por simple responsabilidad le convencería de que se dedicase a otra cosa, y no en La Morgal, sino en cualquier otro trazado. Fuera karting, fuera problemas. Posiblemente él se diría preparado para asumir el riesgo, pero soy yo quien necesita dormir tranquilo.
Como decía hace un par de párrafos, hablando de menores, la carga de la responsabilidad escala un grado y si yo digo no, es no, y eso va a misa, de la misma manera que si acepto las reglas del juego.
Como decía hace un par de párrafos, hablando de menores, la carga de la responsabilidad escala un grado y si yo digo no, es no, y eso va a misa, de la misma manera que si acepto las reglas del juego.
Así que si hay 65 concursantes que plantean dudas sobre la seguridad del circuito asturiano, es que hay 65 irresponsables detrás que o no saben o no se atreven a dar el paso de asumir con todas sus consecuencias que el motorsport, desde sus primeros escalones, no es un actividad lúdica, un pasatiempo, y sí es algo potencialmente peligroso en el que está en liza algo más que quién es el primero o quién queda décimo.
Y aquí radica el problema a mi modo de ver: no entender a qué se juega o lo que se juega cuando un piloto arranca su vehículo, tenga la edad que tenga, puede acarrear funestas consecuencias. Que jueguen los críos está bien, pero que jueguen sus mayores me produce un poquito de vértigo.
Y aquí radica el problema a mi modo de ver: no entender a qué se juega o lo que se juega cuando un piloto arranca su vehículo, tenga la edad que tenga, puede acarrear funestas consecuencias. Que jueguen los críos está bien, pero que jueguen sus mayores me produce un poquito de vértigo.
Os leo.
Un coñazo de carrera. Circuito aburrido. Me dormí hasta la última vuelta.
ResponderEliminarCuanto “gurú” del karting ha salido debajo de las piedras en las últimas horas. ¿Nadie se ha preocupado por preguntar a los equipos?, no a los padres de los pilotos, a los equipos de karting.
ResponderEliminarEquipos formados por gente con más de 20/25 años de experiencia en el mundo del karting algo habrán visto, algo más que los señores de la RFEDA que sólo salen del despacho para cortar la cinta y hacerse la foto.
Fue en USA cuando sólo corrieron 6 coches ¿verdad…? Ninguno de los que no corrió esa carrera dejó la F1, dejaron de correr allí ya que se planteaban dudas con una curva en concreto donde querían una chicane si mal no recuerdo. ¿Verdad…?
En el circuito de La Morgal los karts despegan como aviones y los pilotos no saben donde va a aterrizar el coche, es tan fuerte el golpe que los chasis terminan doblados, cadenas que se salen, un estropicio vamos…
Pero es que resulta que los equipos de karting, no es que no quieran correr allí, sólo han pedido que se aplace la carrera hasta que se solucionen algunos “puntos negros” que han visto. Visto y comunicado tanto a la organización (federación) como a la dirección del circuito. Y uno de estos puntos negro es donde fatídicamente perdió la vida Gonzalo que en paz descanse.
Si tan seguros son estos pianos, ¿cómo es que ayer mismo habían colocado unas colchonetas para que los pilotos no los pisaran? Y mira por dónde, un piloto se engancho con una de estas colchonetas y volcó con su kart, si ayer mismo otro piloto volcaba con su kart, esta vez sin más daños que los materiales.
Pero te digo más, según el reglamento CIK FIA cuando ocurre un accidente hay que realizar un informe lo más detallado posible, con fotos y vídeos si los hubiera, testimonios de los posibles testigos, pilotos afectados, informes médicos etc….y enviarlo a la FIA. Es IMPOSIBLE que un equipo de técnicos, habilitados y documentados emita un informe en 24 h.
Lo lógico, sería aplazar la carrera unos meses. Así, los responsables del circuito podrían hacer, sin prisas, un informe serio. Podrían comunicarlo a los organismos internacionales oportunos. Podrían modificar los pianos y/o lo que fuera necesario.
Comunicar a los medios las modificaciones realizadas. Invitar a todos los pilotos a rodar gratuitamente para que comprueben las mejoras y validen la pista. Y después, sin prisas ni agobios, celebrar la carrera aplazada y todas las que hagan falta.
Pero repito, mejor habla con los equipos, a ver que te dice esa gente con tantísimas carreras de karting a sus espaldas.
Un saludo.
Buenos días ;)
ResponderEliminarAnónimo ;) Sabía que tarde o temprano ibas a venir a hacer el ridículo.
Primero desconoces qué relación tengo con el mundo del karting ni con quién hablé antes de escribir esta entrada. Yo no conduzco karts, eso sí lo sabes porque lo he dicho yo, así que vienes a dar lecciones magistrales sin molestarte en entender de qué va el texto.
Segundo, como todavía no sabes ni afeitarte, no entiendes que estoy hablando de padres y madres, que en el karting, como en otros deportes para jóvenes y niños, proyectan sobre sus hijos sus carencias por ver si se labran una carrera en el mundo del motor y les sacan de pobres...
Los hay, pero esa parte de la realidad es la que no te gusta. Tampoco querrías que hablase de la presión económica sobre los chavales porque los padres están hipotecados o mantienen créditos que sería difícil de pagar si los críos no corren. Así que tienen que correr. Y también podemos hablar de los equipos que tienen expectativas y deudas y si no corre un chaval abrirán espacio para que corra otro... Así que tienen que correr.
Pues bien, el texto va de los que quieren dormir tranquilos haciendo como que no saben que sus hijos e hijas se juegan la vida.
Ea, otro día te preparas mejor el minutito de gloria aquí.
Jose
Pues aquí vuelvo, a por mi “segundo minuto de gloria”. En primer lugar gracias por contestar, con cierto aire de grandeza y bastante condescendiente por cierto, al menos así me lo ha parecido, de cualquier manera gracias.
ResponderEliminarDice usted que el texto habla; “de padres y madres, que en el karting, como en otros deportes para jóvenes y niños, proyectan sobre sus hijos sus carencias por ver si se labran una carrera en el mundo del motor y les sacan de pobres….”
Mal empezamos, si uno es pobre o tiene un mecenas y patrocinadores detrás no toca un kart. Como comenta más adelante este es un deporte caro hasta para practicarlo como hobby. Correr con un equipo una prueba del nacional puede andar entre los 1.200/1.500 € tirando por lo bajo. Y si uno es pobre se hipoteca pero para llegar a fin de mes. Eso lo sabemos los pobres.
Si unos padres se preocupan de su hijo hasta cuando se va de excursión con el colegio, ¿cómo no lo van a hacer cuando practica un deporte de alto riesgo? Conozco madres (abuelas, tías, etc…) que los fines de semana de carrera ponen velas al santo de su devoción pero no para que el niño gane la carrera, si no para que no le pase nada. Conozco padres, que a la hora de la carrera se van a la cafetería o al paddock, porque la ansiedad y el miedo les puede. Y es que saben lo que hay, claro que lo saben. Absolutamente todos los pilotos han tenido un percance, más grande o más pequeño, pero todos han tenido un “susto” en pista.
Anécdota: Campeonato regional de karting de “villanueva del trabuco” (nueva comunidad autónoma que me acabo de inventar), ha finalizado la sesión de clasificación, un padre empuja el carrito porta kart junto a su hijo dirección a la carpa del equipo. El crío no ha tenido una buena actuación y tiene el ceño fruncido, el padre le dice: “cuando lo quieras dejar lo dejas, vendemos todo y nos vamos a eurodisney…” Y eso amigo es lo que hay en un paddock de karting….
¿Entonces por qué lo hacen? ¿Por qué arriesgar la vida de tu hijo y gastarte un pastizal? Primero porque pueden, ya lo he dicho antes, segundo porque al chaval le gusta, ¡le apasiona!, y…. ¿qué no haría un padre por su hijo? No te voy a negar que a los padres se les hincha el pecho cada vez que dicen aquello de “mi hijo es piloto de karting”. Aunque por dentro estén deseando que mejor el chaval se hubiera dedicado al tenis, por ejemplo.
El karting es peligroso, y las world series, y todas las categorías de fórmula…pero existen medidas de seguridad para los coches, equipación del piloto y los circuitos, y sería de tontos muy tontos no querer competir de la forma más segura dentro de lo peligroso de la práctica de estos deportes de motor. Todo eran risas hasta que nos dimos cuenta que el gangoso quería jamón.
De los (padres) que tú hablas, pues sí supongo que también los habrá, pero son minoría y en pocos meses o años como mucho desaparecen de los circuitos. Yo desde luego no conozco ninguno.
Seguramente tienes razón, no he sabido leer tu texto. He pensado que culpabas a los padres de los pilotos de querer aplazar una carrera para poder realizarla de la forma más segura dentro de lo que son las carreras. Y hablas de los padres “hooligans” que por desgracia pululan en todos los deportes, en unos más que otros.
En otra cosa que tienes razón es en que no sé afeitarme, por eso hace 26 años que me dejé barba. Bueno, comenzaba dándote las gracias y termino agradeciéndote el que me dejes expresarme aquí “en tu casa”. Otro día podemos hablar de cómo la RFEDA pasa olímpicamente del karting, bueno del karting y de todo lo que no sean Rallyes….
PD: Hace mucho que perdí el sentido del ridículo, desde entonces vivo mejor ;)
Buenas tardes.
ResponderEliminarPues nada, a romperte el segundo minuto de gloria porque lo tienes tan mal preparado como el primero.
A ver, si tu primera contribución empieza con un «Cuanto “gurú” del karting ha salido debajo de las piedras en las últimas horas», no esperes nunca que te reciba con los brazos abiertos. Te he comentado antes que no sabes qué relación tengo con el karting ni con quien hablo, ni quien me felicita cuando escribo estas cosas, así que dejémoslo en que sigues portándote como un arrogante que viene a dar lecciones.
No hablo de padres hooligans ni de gaitas en vinagre. El karting se ha profesionalizado (es un decir) en unas etapas en las que habría que tener a los chiquillos lo más alejados posible de tanto interés como los rodea, y tu segunda contribución es un nueva muestra de que ni has entendido el texto ni ganas que tienes de hacerlo.
Así que dejémonos de romanticismos, actitudes heróicas y ¿qué no haría un padre por su hijo?, y admitamos que la responsabilidad paterno filial no depende de lo que haga o deje de hacer la RFEDA ni de cuántos cafés te tienes que tomar por no aguantar que tu hijo se juegue el tipo mientras tú le has dado la espalda desde el momento mismo en que asumiste que «su juego» resultaba aceptable para un crío.
Léete la última frase de la entrada, suelo utilizarlas para sintetizar lo que digo.
Jose
Pues como no hay dos sin tres, aquí vuelvo otra vez. Siento si te ha ofendido la frase de los "gurús" pero es un hecho, sólo tienes que darte una vuelta por twitter y facebook.
ResponderEliminarSi mi hijo compitiera en karting todo lo que le ocurra es responsabilidad mía, por supuesto, por eso mismo me preocuparía de que su coche tenga todas las medidas de seguridad así como la equipación que lleve. Por eso mismo, también me preocuparía de la seguridad del circuito.
Si han dejado que el chaval se suba al coche, que lo dejen correr en un campo de minas, total ya son unos ¿cómo has dicho….? Ah si, impresentables e irresponsables. Por que no olvidemos que todo esto viene porque 65 pilotos apoyados por sus equipos con años de experiencia y sus 65 pares de padres han pedido unos cambios en un trazado para mayor seguridad.
Intereses muchísimos, empezando por las federaciones y terminando por los circuitos. Los chavales y sus padres unos enamorados del motorsport. Anda mira, ya he vuelto al romanticismo.
Si de nuevo estoy errado deja de decírmelo y explícamelo como a un niño de cinco años, que quiero entenderte pero por lo visto me levanto más lelo cada día.
Un saludo.
Buenas tardes, de nuevo.
ResponderEliminarNo voy a perder más tiempo con este asunto. Ahora resulta que tu «hecho» en Twitter y Facebook te ha llevado a venir aquí a hablar de lo que a ti te interesa, no de lo que yo he escrito... Vamos, que nos podíamos haber ahorrado tus dos primeras contribuciones y seguramente ésta, porque sigues sin entenderlo y no me voy a molestar en explicártelo.
Te tomo la palabra: «¿Por qué arriesgar la vida de tu hijo y gastarte un pastizal? Primero porque pueden, ya lo he dicho antes, segundo porque al chaval le gusta, ¡le apasiona!». Si no eres capaz de ver la incoherencia que hay en tus propias palabras no soy quién para aclarártelo.
Nos leemos.
Jose
La incoherencia del padre de Fernando, Lewis, Felipe, Kimi...que impresentables e irresponsables...esto hay que mamarlo desde pequeñito, se te mete en las venas y...maldito veneno el motorsport, desde fuera una locura y una irresponsabilidad.
ResponderEliminarNos leemos, claro que sí, como desde hace tantos años
Un saludo
La madre que me parió, ni comer tranquilo me dejáis.
ResponderEliminarA ver, te he dicho que leas la última frase ya que es más o menos la síntesis, y te la voy a pasar para que la leamos juntos: «Que jueguen los críos está bien, pero que jueguen sus mayores me produce un poquito de vértigo.»
El problema, que doy por seguro que conoces tan bien como yo, no es el circuito ni la RFEA, es la homologación, el campeonato en sí.
La seguridad, en este caso, es la excusa para evitar perder la homologación, porque en términos de soluciones, los motores podrían correr capados, la velocidad sería menor, el riesgo también, etcétera, etcétera, pero eso, espero que coincidamos, haría perder la bendita homologación.
También se podrían señalar los puntos negros como los has llamado antes y obligar a los pilotos a reducir la velocidad allí, incluso se podría pedir a todos los participantes que evitaran tocar los pianos, al fin y al cabo esto también se hace incluso en F1. No perderíamos la homologación, se disputaría el campeonato, pero todos sabemos que sería una bomba de relojería porque los críos son críos y ya se sabe que a veces no hacen ni puñetero caso.
Es decir, el juego y la pasión de los chiquillos se supedita a un interés superior que está definido por adultos, y son los adultos quienes buscan las soluciones sabiendo que el pellejo se lo juegan los chavales, porque si por ellos fuera, correrían igual. Esto es lo que me interesaba cuando decidí escribir la entrada.
Sigo en la siguiente ;)
Estamos hartos de ver cómo en todos los deportes infantiles y juveniles se somete a los críos a una presión descomunal porque se espera de ellos que acaben siendo figuras, que destaquen. Y eso —es una opinión, la mía— me parece una aberración porque los chavalillos y chavalillas tienen que disfrutar con lo que hacen antes que cumplir los sueños de nadie. Repito, es una opinión.
ResponderEliminarLa seguridad es imprescindible. Buscarla es legítimo y reclamarla, también. No lo he puesto en duda ni en la entrada: «Como decía hace un par de párrafos, hablando de menores, la carga de la responsabilidad escala un grado y si yo digo no, es no, y eso va a misa, de la misma manera que si acepto las reglas del juego.»
Obviamente hay gente ahí dentro que acepta los riesgos y las reglas del juego, pero con todo lo leído el sábado por la tarde, la sensación que saqué es que había que disputar el campeonato y que para ello había que reducir la altura de los pianos, cuando en motorsport todo es peligroso, incluso un vuelco a baja velocidad puede tener graves consecuencias.
Aquí sé que también coincidimos, pero sigo en la próxima ;)
En este punto es donde como padre digo que si tengo una mínima sospecha, que las había a puñados, no amenazo con no participar, simplemente retiro a mi chaval porque prefiero dormir tranquilo a mirar para otro lado.
ResponderEliminarLa altura de los pianos en La Morgal no serían un problema con un menor paso por curva y unas cuantas toneladas de presión menos en la cabeza de los críos. Hace un rato he planteado algunas soluciones aunque también he admitido que supondrían jugar con fuego porque ellos compiten, tienen el veneno dentro y les daría lo mismo hacerlo de manera más segura utilizando otros mecanismos que sin usarlos. Con lo que volvemos a la homologación, a la RFEA y a los intereses que en justicia no deberían afectarles nunca.
Que jueguen, que se diviertan, que se fogueen. Estoy de acuerdo, y que cada padre o promotor aguante su vela como mejor pueda. Lo escribí como te he pasado antes: «y eso va a misa, de la misma manera que si acepto las reglas del juego.»
Lo de Fernando, Lewis, Felipe y Kimi suena un poco a que llevas perdido este debate, así que te voy te voy a volver a zurrar (con mimo) porque tú y yo, y la mayoría de gente con la que he hablado de este tema, coincide en que después del fatal accidente que se llevó por delante a Gonzalo, a los padres y adultos de los participantes les da yuyo verse en una situación similar.
Es comprensible, pero vuelvo como la burra al prado: como adulto tengo una responsabilidad que va más allá de hacer caso a la RFEA. Tú mismo lo has dicho antes. Se han puesto colchonetas sobre los pianos y volvió a haber un vuelco porque un chaval no calculó bien y se enredó con uno de ellos.
Termino ya: el motorsport es peligroso y hay quien no lo entiende cuando pone a su hijo a conducir un kart. «Que jueguen los críos está bien, pero que jueguen sus mayores me produce un poquito de vértigo.» No me valen soluciones de adultos. Lo siento mucho, pero no me valen.
Venga, que tengas buena tarde ;)
Jose
Perdona por haberte dado la comida y gracias mil porque ahora si que me ha llegado la "honda" (chistaco malo). Ahora queda clarinete esta frase: «Que jueguen los críos está bien, pero que jueguen sus mayores me produce un poquito de vértigo.» Y si la comparto y la suscribo, aún más después de lo que me acaban de contar, hay ahí un tira y afloja del que los chavales nada tienen que ver....
ResponderEliminarDisculpa mi nula comprensión lectora con este tema, tengo la cabeza que me bulle desde hace unos días con esto...y es que si la F1 me gusta el karting ni te cuento.
Un saludo y un abrazote, "el informe de daños" y "el año cero de Valtteri" me lo dejo para la noche para no perder la costumbre ;)
Fdo. El anónimo pesado