Día de rodaje

Más allá de la molestia escenificada por Toto Wolff (Mercedes AMG) o el alegrón provocado entre los aficionados, la prueba realizada por McLaren el viernes pasado en Silverstone sobre una unidad MP/4 29 modificada para albergar la unidad de potencia que estrenará Honda el año que viene, no deja de ser una anécdota.

Bien es cierto que la anécdota de marras ratifica que el fabricante japonés está cumpliendo la hoja de ruta que se marcó para participar con plenas garantías en el Mundial 2015, pero solo ha dejado un montón de buenas vibraciones, nada más.

Los filming days son pequeños atajos previstos en la normativa para que los equipos exploren novedades con ocasión del rodaje de un supuesto material publicitario que seguramente jamás verá la luz, pero en el fondo no deja de ser una triquiñuela que permite trabajar a las escuderías sin ser supervisadas por la federación.

Así las cosas, el día de filmación es un oasis reglamentario y por ello se parece a los entrenamientos de pretemporada o a los habidos con la sesión lanzada. El límite de consumo, por ejemplo, no está vigente, lo que permitiría, un suponer, que el caudal por hora haya sido superado sin problemas durante las 16 vueltas que dio Oliver Turvey al trazado británico. Tampoco hay forma de saber —desde el exterior, se sobrentiende—, a qué régimen de revoluciones ha trabajado el motor turbo de la UP japonesa, ni cuál ha sido el baremo de potencia utilizado por la parte eléctrica, etcétera, etcétera, etcétera...

Siendo sinceros y atendiendo a que el propulsor nipón todavía no ha sido homologado, la prueba realizada por Woking podría haber servido más a McLaren que a Honda, y me explico:

El MP4/29 acumula un montón de kilómetros encima y es fácil entender que a día de hoy, con el campeonato practicamente finalizado, los datos sobre su comportamiento dinámico pueden llegar a producir vértigo. Toda vez que el vehículo del año que viene ya está diseñado y sospecho, en fase avanzada de desarrollo, a la de Boullier le empezaba a hacer falta saber en qué márgenes reales se mueve su proyecto para 2015 y para ello, nada mejor que probar el coche de esta temporada con el propulsor de la próxima, pues las diferencias supondrán una bonita marca para definir si el camino que se ha tomado es correcto o no.

Toda vez que los filming days solo se pueden llevar a cabo con vehículos de la sesión correspondiente, el vehículo solo podía ser un MP4/29, que aunque modificado ligeramente para albergar el propulsor japonés (MP4/29H), se corresponde casi punto por punto con el monoplaza que han conducido Jenson Button y Kevin Magnussen durante 2014 salvo en el tallado del cubrecapot,.

Mi idea, por tanto, es que este pasado viernes no se trataba tanto de probar la unidad de potencia de Honda ni de calibrar cuán de avanzada está, como de sondear hasta qué punto el nuevo propulsor afecta a las coordenadas dinámicas del MP4/29 Mercedes-Benz, ya que esa diferencia es la que ayudará al perfilado del chasis previsto para el MP4/30 Honda.
 

Es una idea. Os leo.