Nasdrovia, tovarish Pirreli!

Paul Hembery se ha quejado de las constantes quejas de los equipos y aficionados (válgame la quejumbrosa cacofonía), tras comprobarse durante el Gran Premio de Rusia que la elección hecha por Pirelli para la prueba en Sochi, fue cualquier cosa menos algo que podía estar enfocado a buscar el espectáculo.

Bien es cierto que este año llevo firmada una extensa tregua con la milanesa, toda vez desde que desde que se hizo con la vitola de proveedora única para la máxima categoría (2011), habiendo perseverado una y otra vez en eso tan feo de andar cambiando las cartas con la temporada lanzada, esta sesión, sin embargo, nos ha brindado un bonito ejemplo de lo que supone cogérsela con papel de fumar desde un principio. Y aquí no caben componendas, ya que por primera vez en cuatro campeonatos, la italiana está cumpliendo a rajatabla con su palabra y las gomas son idénticas para todos, y desde los entrenamientos de pretemporada, lo que viene a ser mucho, se mire como se mire.

Dicho lo cual. Tampoco me parece ni medio normal que Hembery recurra a hacerse el pupas por lo sucedido en la tierra de Putin y lo que se prevé que suceda de aquí a que lleguemos a Abu Dhabi, con la selección de gomas hecha por su empresa.

Suyas son estas palabras de febrero pasado: «La huella de contacto es mayor para ayudar a rebajar la fuerza de torsión extra y la duración es mayor para reducir la degradación. Como mostraron los tiempos en Bahrein, estamos muy cerca de los niveles de rendimiento de 2013, a pesar de la menor capacidad de los motores y la cantidad de retos técnicos que existen.»

En cristiano, que queda mejor. Va para siete meses y medio, Pirelli alertaba por boca de su Director Deportivo, que los compuestos para 2014 eran más resistentes y duraderos que los de la sesión anterior, y puntualizo yo: en toda la gama.

Esto de en toda la gama me parece sumamente importante de contemplar porque de tanto escuchar duros y blandos en las retransmisiones, a uno se le puede meter de puntillas en la mollera que solo hay dos tipos de gomas olvidando que en realidad hay cuatro para seco: superblandos, blandos, medios y duros. Circunstancia que aplicada a lo comentado por Hembery cuando parecía que le venían bien dadas, viene a significar que todos y cada uno de ellos es más duradero y resistente que sus homólogos de la temporada pasada, y que en febrero estaban consiguiendo casi el mismo rendimiento neto en pista.

Y aquí viene donde la matan, porque por las características de Sochi, lo adecuado habría sido tirar de supeblandos y blandos en vez de la cautelosa selección de blandos y medios (option y prime respectivamente), toda vez que...

Bueno, lo habéis pillado así que no abundo en el tema. Si el rendimiento de las ruedas se puede considerar asimilable al de 2013 aunque resulten pelín más duras; si además se ha cubierto 3/4 partes de la sesión con pruebas de los compuestos sobre asfalto, como para dar y tomar, no es de recibo elegir unas gomas que a la postre y en el vehículo de Nico Rosberg, duraron 52 giros de los 53 que componían la carrera. Ni mucho menos estirar la cosa hasta el punto de cabrear a mi Felipe, eligiendo medios y duros para la cita de Interlagos.

A lo peor es que Paul oculta alguna cosilla y resulta que con tanta carrera con presencia de agua como hemos tenido, el stock de neumáticos sin usar le llega en la fábrica hasta la oficina, que bien mirado, también podría ser.

Os leo.