Jogo bonito

¡Temblad. La FIA ha vuelto...! Pero tampoco os lo toméis demasiado a pecho porque esto viene a ser como el ritual de la marmota en Punxsutawney, que tiene mucho de folclore.

Ya os dije al comienzo de la temporada que para Silverstone había cambio de guionista, así que siendo sincero tengo que admitir que el último despropósito federativo no me pilla de nuevas. El domingo pasado también mencionaba la vuelta de tuerca a la que se había sometido al guión con eso de que un británico ganase en Gran Bretaña porque había auténtica necesidad de apretar la cabeza de la calificación, ya que las audiencias y la acumulación de asientos vacíos en las gradas, apuntan desde hace meses a que la temporada quizás se haya terminado demasiado pronto.

Pero a lo que iba, a las tradicionales metidas de mano en el bolso con las que nos tiene acostumbrados la cúpula que dirige normativa y deportivamente la Fórmula 1, esa mano negra que siempre florece alrededor del Gran Premio que abrió el Mundial de F1 en 1950 para retocar el cuadro a destiempo, ese fantasma doméstico con el que ya nos hemos acostumbrado a convivir los más ancianos del lugar y al que algunas veces, incluso invitamos a una cervecita fría y cacahuetes.

En fin, como sabemos a estas horas, la FIA quiere meter mano al sistema de suspensiones interactivas conocido como FRIC (Front to Rear Interlinked Suspension), por ver si pone algún palo en las ruedas a Mercedes AMG en su paseo militar por 2014 y para incentivar en lo posible lo que ya comienza a resultar tremendamente tedioso y negativo para el negocio. Pero no temáis lo más mínimo, el campeonato se lo lleva la de la estrella, eso es un fijo en la quiniela, por ello auguro solemnemente que todo esto que está sucediendo es tan solo un entremés.

Lo que sí me hace esbozar una sonrisa y me ha llevado a escribir esta entrada, es la coincidencia en tiempo y hora que han tenido el conocimiento público del despropósito y la aparición en la prensa española de un nuevo artículo que redundaba ayer mismo, sobre esa leyenda urbana que afirma que las unidades de potencia de Mercedes-Benz pata negra podrían se capaces de arrojar 100 caballos de potencia más que las UP clientes y las plataformas rivales, postulando de nuevo que ahí radica la ventaja de Brackley, cuando la FIA avisaba la semana pasada que se reducen para 2015 las horas de túnel de viento y está a punto de meter un torpedo en la línea de flotación aerodinámica del W05.

Aerodinámica, a ver si nos lo metemos en la cabeza. El quid de la cuestión de la superioridad de los Mercedes AMG es la aerodinámica, esa cosa que se dijo el año pasado que se vería seriamente reducida con la implantación de la nueva normativa y que se ve ahora que no ha podido ser contrarrestada para evitar de nuevo, que quien da primero en pretemporada, tenga todas las papeletas para calzarse el Mundial con sus pilotos conduciendo con una mano y sacando el brazo que queda libre por fuera del habitáculo.

Aerodinámica, esa disciplina en la que son expertos los tipos encargados de erradicarla. Jogo bonito, no me digáis que no.