No sé a vosotros, pero este consenso que se ha originado a cuenta de lo que sucedió en McLaren durante la temporada 2007, me está sentando incluso mal.
No es que no me alegre de que las piezas hayan ido encajando poco a poco hasta el punto de que hoy a nadie le extrañe oír que a Fernando le hicieron trizas en Woking. No, no es eso, ni tampoco que me moleste que nuestro paladar se haya acostumbrado a percibir este tipo de matices perversos que nos rodean y que lamentablemente son más comunes de lo que cabría pensar o incluso esperar, permitiéndonos observar desde la barrera las injusticias que se están cometiendo con Webber o Button con un puntito de salud mental, que visto lo visto, hace apenas tres años resultaba impensable, porque cabe recordar que en 2007 éramos pocos y que la abuela no parió ni tanto así, de manera que por aquel entonces, intentar explicar que al Nano le estaban pasando ignominiosamente por la piedra resultaba casi un insulto a la inteligencia.
El devenir de Kovalainen en la escuadra británica, extrañamente errático y pleno de avatares de difícil explicación para un tipo que había sabido sacar al R27 de Renault lo que no tenía, vinieron a poner a la escudería británica donde militaba el finlandés hasta el año pasado, en una especie de cuarentena que el desembarco del actual campeón del mundo ha hecho saltar por los aires. Button había sido llamado a servir a Hamilton, sí o sí, y aquí le tenemos a falta de dos carreras para terminar todo esto, como flamante escudero de un tipo brillante que debería ser el primero en hacer ascos de la alfombra roja que se han empeñado en tender a sus pies.
El caso de Webber es más duro de tragar. El australiano ya estaba en Red Bull cuando llegó el jovencísimo Vettel, y ha habido que romperle las piernas para intentar ponerle en su sitio, como gregario, a primera sangre, a pesar de que él ha demostrado de sobra saber mejor que nadie lo que quiere, mientras su compañero alemán se ha empeñado en hacer el gilipuertas durante más de media sesión…
Siendo sincero, no hay nada nuevo bajo el sol. A Peterson le jodieron de lo lindo para que no hiciera sombra a Andretti cuando años antes Chapman le había utilizado para doblegar a Fittipaldi; a Reutemann lo sacrificaron en favor de Jones; a Prost en favor de Lauda… Por comportamiento reiterado no debería asombrarnos pues debe ir en la nómina, como decía aquél, pero en 2007 había suficientes ejemplos a mano como para no haber vuelto la cara ante lo que le estaba pasando al por entonces vigente campeón del mundo en su estrenada etapa con la segunda escudería de la parrilla.
Como decía al principio, me está sentando mal tanta comprensión actual sobre aquello, porque suena a lo de Santo Tomás cuando no a rastrera chaquetería; de cualquier forma, delatando que a toro pasado todo esfuerzo se queda en nada porque el que realmente vale es el se expresa o ejerce cuando hace falta.
Fernando pudo partirse, romperse, arruinarse por completo en aquella soledad mal comprendida o simplemente negada desde unas afueras que no supieron o quisieron mojarse. Hemos salido bien parados, no soy tan imbécil como para negarlo. Alonso está hecho de lo que pocos hombres, pero nos queda Jaime y en este país cainita seguimos anclados en 2007, y lo que le sucedió al Nano debería servirnos para cerrar filas alrededor del barcelonés, pues tres años dan para mucho: para que comprendamos la verdad demasiado tarde o para que seamos cómplices de un despeñe por el precipicio.
Alguersuari es español y rematadamente bueno. No juguemos a la ruleta rusa y demostremos de una puñetera vez que sabemos aprender de nuestros errores.
Totalmente de acuerdo en la primera parte de la exposición, aunque creo que no eramos tan pocos los que simplemente veíamos lo que estaba sucediendo.
ResponderEliminarPero creo que se me scapa algo. No acabo de encajar a Jaime en el puzle. Quizás sea por ignorancia. Tal vez me falte información y por ello no veo el hueco donde colocar esa pieza.
A Fernando le amargaron el 2007 y esa presión desencadenó una serie de errores propios que le llevaron a perder le mundial (según yo veo, España, Canadá y Japón), amén que, o a su coche le pasaba algo extraño, o no es lógico que fuera cuatro decimas más lento en china y brasil...
ResponderEliminarRespecto a Jaime, parece que está mejorando pero no puede escudarse siempre en que los resultados no llegan por tal o cual circunstancia...tiene que saber que si da lo mejor de si mismo y demuestra que es rápido, da igual que falle la estrategia o que le echen de pista o que se rompa su coche...los resultados llegarán tarde o temprano.
Yo tampoco acabo de pillar el equivalente con Jaime. Ni uno es Fernando ni el otro es Hamilton. Ni una ha sido campeón ni el otro lo será.
ResponderEliminarJaime ha ido mejorando, lo que ocurre es que esta Toro Rosso no es tampoco aquella para la que corrió Vettel...y se nota. Un poco de tiempo, unas lecciones de humildad y mucha seriedad deberían llevar a Jaime más arriba.
ResponderEliminarUn besote
Así es, ahora que el bicampeón tiene de nuevo un cohe competitivo está demostrando a todos lo que pasó con los de Woking. Pero, ¿y si lo hubiesen hundido?, ¿y si hubiese seguido en el nido de ratas?, todo se vería de forma distinta, o más bien no se vería, y ahí es donde está el quid, es la victoria la única que da la razón, el vencedor el que cuenta la historia. La madera de Fernando es la de campeón, y eso traspasa todos los velos y barreras, y es tan pujante su clase que acabaría por salir, pero no es el caso de todos.
ResponderEliminarSuena Jaime como compañero de Vettel, y ahí es donde vislumbro el peligro de nuevo, Jaime entraría encandilado por la capacidad de su nuevo monoplaza, pero ay de él si amenaza el papel de Vettel, ya hemos visto a Webbe: cómo posiblemente pierda un campeonato que, de haber tenido un jefe de equipo que hiciese su trabajo, habría ganado.
Buenas tardes
ResponderEliminarCreo que te entiendo, y además creo que de estas situaciones tenemos que aprender para el futuro, y de ahí la referencia a Alwer, posible segundo piloto de Red Bull el año que viene o el otro.
Estos últimos 3 años, toda clase de sujetos, sujetitos y sujetillos han clamado contra Alonso acusando al bicampeon de todos los males que adolecen en el mundo, incluyendo el asesinato de JFK.
Pues bien, después del verano, cuando el nano ha vuelto arriba e incluso de lider contra todo pronostico, esta gente ha tenido que apuntarse a la corriente ganadora e incluso ponerse de parte de los "alonsistas de toda la vida" al hablar de lo acontecido en el 2007. Era la única manera de explicar lo que está pasando este año sin contradecirse a si mismos.
Sinceramente, yo a esta gente tampoco la quiero de mi lado. Si Alonso no gana el mundial, aun quedan dos carreras, actuarían como la nueva inquisición, acorralando a todo y a todos los que intenten defender que lo que sigue haciendo el nano es muy grande.
Un abrazo y prodigate más, siempre nos haces pensar, y esa espoleta siempre es bueno tenerla en nuestras vidas.
Orroe, el caso es que parece que ahora que muchos se dan cuenta de lo que de verdad ocurrió en 2007... ya se alzan multitud de voces, sobre todo desde esas islas, diciendo que si este mundial lo gana Fernando Alonso estará devaluado.
ResponderEliminarEs increible. No les bastó con doblegar (lo intentaron, no lo consiguieron) al piloto en aquel año fatídico hasta límites insospechados. No les bastó con que pasara dos años de travesía del desierto en un equipo venido a menos. No les ha bastado con los tejemanejes que Whiting ha tenido que forzar en esta temporada para tenerlo contra las cuerdas. Les gustaría que ganara cualquiera que no fuera Alonso, sobre todo ya sabemos quién... pero se van a fastidiar, porque Fernando Alonso es el mejor piloto de su generación. Punto.