Para no sentirme tan solo mientras le doy a la plumilla en el estudio, me estoy haciendo acompañar estos días, y desde el ordenador, por la retransmisión en diferido de carreras que tuvieron lugar en aquel momento en que comencé a enamorarme de todo esto. Las escucho en versión original, con las voces de los comentaristas sobresaliendo por encima del rugido de los motores, y siendo sincero, creo que sólo me falta el olorcillo a gasolina, a aceite quemado o a goma quemada, para que mi felicidad sea completa, así que me estoy pensando seriamente poner debajo de mi tablero de dibujo una serie de latas que contengan tan sagrados ingredientes…
Fuera de bromas, lo cierto es que entre unas cosas y otras he visto desde mecánicos con monos de mecánico y llenos de grasa, a pilotos que parecen auténticos seres humanos que han sudado la camiseta o que están ofreciendo una entrevista a un periodista con la misma sencillez que un jugador de regional se la daría al reportero de la radio local, pasando por patrones a los que sólo les falta el bocadillo en la mano que no sujeta el cronómetro; todo ello en un entorno tan precario y hermoso a la vez, como para ofrecer la visión incomparable de un podio montado sobre la parte trasera de una camioneta que está siendo rodeada por una multitud de aficionados que jalean a sus héroes.
Así las cosas no me extraña en absoluto que Fernando, Jenson y Felipe, describieran como inenarrable lo que sintieron subidos a lo más alto de Monza, con el asfalto de la zona circundante a los boxes italianos ocultado por la presencia de miles de aficionados y banderas, cuya estela se prolongaba más allá del horizonte…
Que a la F1 no la conoce ni la madre que la parió es una verdad que ya no sorprende a nadie, pero tengo que admitir que no imaginaba que la cosa hubiera cambiado tanto, porque con la vista posada en aquellos 70 del siglo pasado que estoy rememorando desde estas líneas, maldigo la hora en que se ha impuesto tanta limpieza y tanta distancia en este bendito deporte, y alzo la voz aún más porque esta inmaculada modernidad responde sólo a la necesidad de que los patrocinadores puedan dormir tranquilos en sus camas sabiendo que su saldo bancario ha sido visto desde todos los puntos del orbe.
Porque en el fondo ésa es la razón, y no otra, no nos engañemos. El dinero soporta al deporte pero lo fagocita, en la F1 y en todo lugar donde se hace presente. Comienza ocupando pequeños espacios en la carrocería, en los trajes de los pilotos, en sus cascos, y va desterrando las esencias, cargándose las señas de identidad de todo lo que pilla a su paso, anulándolas si es preciso, para imponier su criterio y su poder…
Nos ha sucedido y ya es tarde para lamentarlo, aunque todavía es tiempo para pedir cuentas al imbécil que tuvo la brillante idea de vender incluso la corona de laurel por un plato de lentejas.
Cachondo de mi alma, ¿me estás leyendo?
Pues no te lo vas a creer, pero me empecé a aficcionar a ver carreras porque James Hunt me parecía "irresistible" XDDDDDDD...Diosss XDDDDDDD. Yo creo que era por la corona de laurel....XDDDDD
ResponderEliminarUn besote
Buenas tardes.
ResponderEliminarConcha;)XDDDDDD ¡Vaya look que elegistes! XDDDDDDDDDDDD Sí, sería por la corona, fijo ;)
Un besote
Jose
PD: Me estoy alcanzando después de unos días de teneros a dos velas. Tened paciencia que espero llegar a puerto esta misma tarde... Total ¿qué son cuatro entradas? XDDDDDDDDD
Si... pero los tiempos cambian en todo y para todo: para lo bueno y para lo malo, y nos guste o no, es así y lo será siempre.
ResponderEliminarCiertamente los años 70-80 fueron los mejores para nosotros, pero la generación actual recordará especialmente los años de Alonso cuando se hagan mayores. Es ley de vida.
¿Que cambian los tiempos. ¿Quién imagina ahora a un piloto dejando su coche parado en Loews, sacando una cámara de fotos y tomar la instantánea de un pibón ligera de ropa??? Ese era Hunt y su leyenda.JA,JA,JA.
ResponderEliminarBuenas noches.
ResponderEliminarMaese ;) Yo lo acepto, que conste, pero da gusto ver aquello comparado con lo que tenemos, y será ley de vida, lo admito, pero hay que contarlo para que los que nos sucedan sepan de donde venimos ;)
Sinónimo ;) Nadie, y es una pena. Kimi era el único resto que nos quedaba de aquella irreverencia, y anda en los rallyes... ¿Será un síntoma, o una evidencia?
Un abrazote
Jose
…lo que decía Juancho cuando se largó, que un campeonato en el que hay que pedir permiso por radio para adelantar no le interesa…
ResponderEliminarOtros tiempos: Brasil 07. No podía haber más tensión entre los Mclaren y con unos Ferraris dominantes. El más insospechado consiguió muchos valiosos segundos de TV para sus pegatinas. Como no podía hacer nada destacable en carrera lo hizo a base de espectaculares piñazos. El Renault acosado por Ghosn.
2010. Tal vez los problemas que se encuentran los punteros para doblar a los Lotus se deban a esa necesidad de conseguir segundos de TV al precio que sea. ¿Mike aprendió la lección? Es penoso cuando solo se puede competir por segundos de TV.
¡Saludos al anfitrión y a los invitados!
Si os digo la verdad, yo no conozco más F1 que a partir de Alonso. Conozco lo anterior porque para eso está la wikipedia y el youtube, pero no tengo tiempo para culturizarme. Gracias a estos post me voy enterando de más.
ResponderEliminarHasta Senna y Prost son lejanos para mi. De todos modos en esto nada es comparable. Los coches son muy distintos y la parafernalia... pues ya lo ha explicado Orroe.
Sin embargo, o por eso mismo, creo que se mitifica el pasado. Estos detalles de campeón de los 70 los deben vivir la gente de los karts cada fin de semana, pero la F1 es otra cosa.
Ya os digo, no he vivido otra F1 que la del señor del pelo blanco. Me parece mucho más lamentable el papel del poder-legislativo-sometido-al-dinero que es la FIA. El espectáculo quedaría más lucido.
Es posible que tengas razón Raúl, y que cometamos el error de pensar que "cualquier tiempo pasado fue mejor".
ResponderEliminarDentro de unos años a tí te pasará lo mismo, porque esto es como la música: cada generación tiene la suya.
bien visto
ResponderEliminarPues para mí el recuerdo de la muerte de Peterson, con el monoplaza en llamas y las piernas destrozadas en Monza, y la de Villeneuve en Zolder tirado sobre la hierba junto a la valla, fueron seguramente mucho más dolorosas que las del añorado Ayrton quizá por el hecho de que esta última ya no me resultó tan dura al haber crecido y estar mucho más familiarizado con la tan temida guadaña.
ResponderEliminarPor suerte, este tan querido deporte para todos nosotros ha mejorado enormemente a lo largo de tantos y tantos años especialmente en el tema de la seguridad y gracias a gente como el gran Jackie.
Sin embargo, en otros muchos sentidos parece haber dado pasos gigantescos hacia atrás con una Fórmula 1 desnaturalizada, con circuitos sin carácter e insulsos a rabiar, con órdenes de equipo sin pies ni cabeza, etc.
Yo sí que estoy con aquello de que aquellos tiempos pasados fueron mejores. ¡Cómo me hubiera gustado ver pilotar a gente como Fangio, Moss, Rindt, Clark, Hill, Fittipaldi y tantos y tantos otros!
King Crimson
Lo qu esta claro es que hoy la F1 da mas sensación de profesionalidad, los pilotos son deportistas que tienen unos programas de entrenamiento muy duros y llevan una vida "sana"(alguna excepción habrá).
ResponderEliminarNo me imagino a James Hunt participando en un triatlon. Me quedo con la imagen de la foto de Hunt con un pitillo y una cervecita despues de la carrera, y probablemente intentando llevarse al hotel a la pit babe de su lado.
Sin desmerecer a los atletas de hoy (creo que es un deporte muy duro y lo requiere, un tipo capaz de irse de juerga la noche antes de un Gran Premio me genera una simpatía "gamberra" especial.
Salu2
Buenos días ;)
ResponderEliminarJ-Car ;) En buena lógica debería haber espacio para que cupiera de todo, pero con un reglamento, mejor dicho, un concepto que pretende tener bajo riendas a todo lo que se menea, es complicado que el deporte y la competición saquen la cabeza para respirar :P
Raul Z ;) Ahí estamos. Todo está supeditado y resulta bastante coñazo, y mientras se pierde el rastro de lo que fue para que nos pongan implantes de silicona XDDDDD
Maese ;) Independientemente de eso, que razón llevas XDDDDD, convendría que desde arriba se trazaran puentes sobre el pasado, porque a fin y a cuentas, lo utilizan para justificar cualquier tontería de este presente en que se han empeñado :P
King Crimson ;) Como se comentaba más arriba, también es cierto que el chusco presente nos hace mirar el pasado con menos lupa y más amor, pero en general estoy bastante de acuerdo con lo que comentas :P
Lippy ;) Tiene su puntito, ¿a que sí? XDDDDDDDDDDDDDDD
Un abrazote
Jose