Pedir es humano y gratuito, soñar también, pero aumentar ficticiamente la presión sobre un piloto resulta bastante bobo, aunque, periodísticamente hablando, arroje unos bonitos clics extra.
Menos mal que a Russell le estarán importando un pimiento las voces y opiniones de aquellos que lo ven con capacidad de llevar a su compañero contra las cuerdas, incluso de superar al heptacampeón esta misma temporada. George está viviendo su propio sueño en Brackley y es seguro que sabe perfectamente cuál va a ser su cometido y qué espera de él su equipo, y, obviamente, nada de esto pasa porque moleste mucho al astro o comprometa los planes de Mercedes AMG para este año.
El de Norfolk lo hará bien, sin duda, pero resulta bastante bananero postularlo ya como el tipo que puede jubilar a Hamilton, ni siquiera aceptando como animal de compañía la composición del supuesto en el habitual modo condicional. ¿Puede?, ¿realmente puede? Yo diría que no le han contratado para que pueda, sino para que se foguée y quite puntos a Red Bull.
Os leo.
Coincido en que no es equiparable a lo de mi Vettel, si bien por distinto motivo. Más allá de Elkan, creo que hay un Seb pre-Hockenheim y otro post. Bajo mi punto de vista, la mitad de su confianza se quedó en aquella curva (nueve?) y, desde entonces, solo ha sido un piloto incompleto que, como él mismo reconoció, tuvo que enfrentarse a su propio equipo (en 2020) y "al mayor talento que me he encontrado". Es más, si Ferrari hubiera hecho bien las cosas en 2019, a lo mejor Lewis tenía uno menos y el monegasco el primero.
ResponderEliminarEntiendo tu cautela, al fin y al cabo, tratándose de Mercedes y Lewis, con la Iglesia y el Papa hemos topado. Pero, aunque lo apuntas, yo iría más al fondo de la cuestión: George es más británico que Hamilton. Así que, el lobby de profetas será inquisidor en cuanto vean la posibilidad de un nuevo Mesías y entonces... quiero ver a Toto bailar.
Ya sabes que, de la F1 actual, Charles y Russell son mi ojo derecho e izquierdo. Y si has seguido la carrera deportiva del inglés verás que es un piloto de adaptación media que, cuando ya se ha acomodado, resulta imparable (pese a algunos errores de concentración). Al ser el Mercedes un coche muy superior al Williams, dicha transición será más rápida y, si vienen mal dadas, el de Norfolk hará como Ricciardo en 2014.
Yo apostaría por él en la batalla con Lewis, con la única duda del coste en puntos que le supondrán los errores (los tendrá). Algo me dice que Mercedes ha querido preservar a Lewis para encumbrar a su nueva estrella como "el piloto que jubiló al heptacampeón". Por lo que, si vienen mal dadas, los de Brackley NO harán como RB en 2014... un win-win en toda regla.
P.D. Ahora que menciono aquel GP de Hockenheim... allí tampoco le dejaron ganar a Bottas. Pero de eso solo se acuerda el propio finlandés y algunos amigos como nosotros. :p
Un saludo! :)