I'm not Rosberg...

Pues claro que Bottas no es Rosberg. No es alemán en una escudería «tan alemana» como Mercedes AMG, ni tiene un Dieter Zetsche a la espalda, muy a la espalda, ni Brackley le dará jamás la oportunidad de lidiar con Hamilton en más o menos igualdad de condiciones. Imagino que su contrato con Brackley también es distinto y que nunca se ha reunido con Bernie Ecclestone con un casco prusiano como testigo...

En realidad, la propia lectura que se ha hecho de las últimas declaraciones del piloto de Nastola habla a las claras de lo poquito que vale Valtteri con respecto al Campeón Mundial de 2016, al menos desde el plano mediático. 

Y es que, como sucede con cientos y cientos de cosas en nuestro ámbito, nos hemos vuelto a olvidar del trato que se dio al hijo de Keke hasta que pudo clavar en el corcho de las mariposas a Hamilton, la mucha risa que producía Britney entonces y el valor de la competición limpia en el seno de la escudería de Toto Wolff, con un Paddy Lowe lanzando al aire frases que podía haber escrito Paulo Coelho: «Imagínense si hubiéramos impuesto órdenes de equipo. Qué cosa terrible sería para la F1 y la filosofía de Mercedes en el automovilismo...»

Yo que vosotros echaría esta tarde revisando la abundante hemeroteca de aquellos años. No tiene desperdicio. Y ya, si queréis descojonaros del todo, miraría lo dicho por nuestros gurús entre 2014 y finales de 2016, momento en que la retirada de Rosberg abrió la tanda de lapidación pública con John Cleese oficiando la ceremonia en el papel de sacerdote fariseo. Luego, os pasáis por Nürbu, para contrastar, no más.

En fin, Valtteri no es Nico, es evidente. Tampoco es Lewis, pero el finlandés no ha mentido afirmando «I'm not Rosberg, I do my talking on track and race fair». A partir de aquí construís el relato que más os apetezca, pero haceros un favor: huid de los de donde dije digo digo Diego y sus apuestas a caballo ganador, porque son la base del problema con nuestra percepción del de Nastola y todo lo aquello que no alcanza rango de verdad hasta que no es sancionado por los medios británicos.

Ea, muy buenos días. Os leo.