Malpaso [Renault]

No creo que al bueno de Clint Eastwood le moleste demasiado que tome prestado el nombre de su productora para referirme en esta entrada a la escudería de Enstone, a fin y a cuentas, Malpaso Creek, como muchos lugares de la Tierra, toma su denominación de algo que sucedió allí hace edades olvidadas o que no debió suceder jamás... un aviso, vamos.

Y sí, creo que le va al pelo que llamemos Malpaso a la temporada que ha firmado Renault porque una equivocación en cierto modo menor —articular el diseño del RS19 alrededor de la evolución de la unidad de potencia—, ha originado una escalada de acontecimientos que ha terminado dando la razón a Red Bull en sus quejas anteriores a 2019, ha llevado a que la anglo-francesa sea la única escudería de fábrica que ha quedado por detrás de su cliente y que éste se busque las alubias con Mercedes-Benz a partir de 2021, que Daniel Ricciardo haya estado irreconocible, que Nico Hulkenberg abandone la escuadra, y que Cyril Abiteboul haya manchado su hoja de servicios quién sabe si de manera irreversible.

Han pasado más cosas y en sentido estricto también debemos valorarlas, la caída de Carlos Ghosn, por ejemplo, y la consiguiente convulsión en la cúpula del grupo, o la pérdida de puntos en Japón tras la queja de Racing Point. En todo caso, que es a lo que vamos, la historia de Renault durante esta campaña no hay por dónde cogerla.

El esperado MGU-K originó más problemas de los esperados en su incorporación a la unidad de potencia y esto lastró los pasos iniciales del monoplaza, y a partir de ahí todo ha sido un morir lento o un resistirse a morir en cámara lenta, como prefiráis tomarlo. Y lo malo es que para La Régie éste era el momento en el cual demostrar que Milton Keynes había comprometido el desarrollo global de la UP E. Tech 19, y de no haber sido por McLaren nos habríamos quedado con las ganas.

Abiteboul ha pecado de pardillo. Seguramente otro gallo habría cantado si el parisino hubiese callado en vez de haber enseñado sus cartas en la guerra que ha llevado contra herr doktor Marko, porque una vez mostradas y dispuestas sobre la mesa, cualquier error o contratiempo ha sido utilizado por su archienemigo, a través de sus medios afines, para sustantivar que Enstone no da para escudería puntera.

Sea como sea, un quinto puesto en la general de constructores tampoco es un mal negocio. Para Renault éste era el año uno y entre fabricante y cliente tampoco se puede decir que se haya firmado mal. Eso sí, en 2020 Dios dirá.

Os leo.