El caso de Wihuri resulta paradigmático en nuestro actual estado de cosas. Deja de patrocinar a Valtteri Bottas y la inmensa mayoría de titulares aluden al bajo rendimiento del finlandés como causante, cuando la causa es el alto precio que le supone al conglomerado participar en el exclusivo club de la Fórmula 1 para el poco rendimiento que obtiene a cambio, claro está, que es donde encaja el piloto de Nastola, pues el pobrecito mío sólo ha sido quinto en la general de conductores conduciendo un W09, entre otras cosas porque hace de segundo en Brackley y Toto incluso consideró inteligente impedir que venciera en el Gran Premio de Rusia para mayor gloria de Hamilton.
Escribo a vuelapluma y no sé ahora en qué carrera de esta temporada los aficionados finlandeses reclamaron un mejor trato para sus compatriotas durante la ceremonia del podio. Sería cuestión de buscarlo, aunque, en fin, parece un poco irrelevante si no fuera que aquí intuyo que está la raíz de todo.
Antti Aarnio-Wihuri, Presidente de Wihuri, fue piloto de carreras en sus años mozos y entiendo que sabe perfectamente de qué va la cosa, vamos, que no ha actuado en plan calentón mediterráneo. Y si eres finlandés y a lo máximo que aspiras es a que te llamen sobrevalorado porque te ponen a proteger las espaldas de un Sebastian o un Lewis, veo bastante normal que Finlandia dé la espalda al negocio porque total pa'qué.
He leído la noticia en varios medios y desgraciadamente siempre he sacado la misma conclusión: el asunto de respaldar a un conductor de casa resulta demasiado caro para la poca visibilidad que se obtiene como retorno y a este patrocinador en concreto, no le renta continuar participando en la feria de vanidades que es nuestro deporte en la actualidad.
Voy más lejos, percibo entre líneas una crítica a la actividad porque en palabras de Aarnio-Wihuri no se trata de que Valtteri sea un matao y mira tú qué pobre que sólo ha sido capaz de ser quinto, sino que hay una queja en plan Bottas podría estar mucho más arriba y mira qué estúpido es todo esto que sólo puede ser quinto...
Admito que es una cuestión de verlo, pero como decía al principio, me parece que no se trata de que el patrocinador personal de un piloto le haya retirado su crédito y confianza, sino, más bien, que este tipo de aventuras son demasiado caras como para exigir a nadie que siga haciendo el gilipollas en aras de que las luces de los focos y el resto de mandangas se las apropien los de siempre.
Os leo.
Os leo.
Si no es solo por Hamilton... Hasta Ferrari entra en el cálculo de Toto.
ResponderEliminarEs que si no hay un poco de rojo, la cosa canta demasiado.
Decian que Jamilton iba a devolverle la victoria cuando fuera lider destacado... jajaja.... jajajajaja..... jajajajajajaja
ResponderEliminar