Las cosas de Toyota

No me pidáis demasiado en esta entrada porque hoy cumplo años y os podéis imaginar cuán cargadito llevo el día. 

Recepción a la Queen de Inglaterra a media mañana; de potes con Bernie antes de almorzar; comida frugal porque estoy en una edad en la que hay que comenzar a cuidarse, aunque ya aviso que ha quedado pizza para dos días. En fin, luego a Loiu para recoger a Chase y a Ross... 

Y entre medias, que te llama Flavio o te whatsappean Nico, Jenson y Lewis, o haces skype con Pastor o mi Felipe. Un no parar. Pero ¡ojito, que tampoco me quejo!, tal y como están las cosas, ocupar según Forbes la posición mil trescientos veintiún millones ciento noventa y dos mil trescientas setenta y dos entre las personas más influyentes del mundo mundial, es algo que no tiene despercidio.

Total, que me he perdido la FP3 pero he disfrutado de la clasificación para las 6 Horas de Silverstone aunque muy de aquella manera, y puesto que la bandera roja provocada por Van Eerd y su LMP2 la ha dejado algo coja de tiempo, la tripulación del Toyota número 7 ha ganado a la del 8 por la mano y mañana, López (rapidísimo hoy), Conway y Kobayashi, salen delante de Nakajima, Buemi y Alonso.

Pero tampoco hay que volverse locos con esto. El TS050 que ha hecho la pole este mediodía ha ido todo el fin de semana sensiblemente mejor que su directo rival, y entre que Kazuki sigue mostrándose incómodo con los los setups más agresivos de su vehículo (ya le sucedió en Spa) y que Pechito ha salido a comerse todo lo que tenía por delante, el resultado final no deja de ser un perfecto retrato de cómo estaban las cosas de Toyota en Silverstone.

Mañana a ver si vivo un poco más tranquilo y os cuento qué tal ha ido la carrera, porque el asunto está tan emparejado que cualquier circunstancia puede decantar el fiel de la balanza a uno u otro garaje de la japonesa. Vamos, que las 6 Horas prometen ser bastante divertidas.

Os leo.