La comodidad de Kimi

Kimi es el hombre que vale pa'tó. En Austria no cumplía órdenes y en Gran Bretaña sí, y así. 

En Australia lo sacrificaba Maranello cuando sacaba casi tres segundos de ventaja a Seb. En Bahrein volvía a hacer de gusana en el anzuelo tendido a Brackley aunque luego abandonaba. Y en China lo mismo pero sin abandono. Total, que la prensa italiana le dice a Ferrari en abril: ¡no son formas, macho; no son formas...! [La prensa italiana critica el trato de Ferrari hacia Raikkönen]; y aquí estamos, a comienzos de julio, con gente lamentándose en público porque es una pena que Iceman no haya sabido rentabilizar mejor esta temporada.

Que digo yo que a lo mejor tiene que ver en todo esto eso otro de que de 10 carreras tu equipo te haya jodido 3 —que sepamos, que luego están el cambio de comportamiento del SF71H y la biela en el volante de Vettel, por ejemplo—, y con un canto en los dientes, ¿no?

Raikkonen se encuentra cómodo porque ha sabido adaptarse. Se le notaba cómodo ya desde Francia, cuando cedió amablemente su posición para que la remontada de Sebastian fuese rotunda de la muerte, aunque al final no pudo ser debido a que las gomas del coche del alemán dijeron basta antes de tiempo. En todo caso, que es a lo que vamos esta mañana, Kimi ha encontrado la comodidad que necesitaba —a los escuderos también les gusta, ¡nos ha fastidiado!— y está dando la mejor versión de sí mismo precisamente debido a ella, y a mí la pregunta que me asalta después de disfrutarlo como un jabato en Silverstone, es: ¿por qué la comodidad del finlandés no ha sido una prioridad en Maranello?

Lo cierto es que hemos hablado mucho de esto mismo aquí, en Nürbu. Por hache o por be la prioridad en la rossa desde 2015 ha sido ponérselo fácil a Vettel. 

Sí, ya sé que es el número 1 del equipo italiano y que cobra un pastizal y es tetracampeón y tal, pero La Scuderia no se ha comido un colín en el de Marcas desde entonces, cosa que siempre me ha parecido grave porque la solución estaba muy a mano: darle al de Espoo lo que necesitaba ya que en situaciones favorables suele responder estupendamente.

Si no hubiese tocado este punto tantas veces seguramente no me merecería echar el ratito mencionándolo de nuevo, pero a las pruebas me remito: Francia, Austria, y ahora Gran Bretaña, nos han dejado entrever que Ferrari ha ganado en solidez, no sólo mecánica, competitiva también, y ya es casualidad, como vengo diciendo, que esta circunstancia coincida en el tiempo con esa comodidad que se percibe en Kimi.

Y nada más. Os leo.