Pues vale...

Acostumbrado a que estas cosas sólo le sucedieran a Ferrari (ejem, ejem), casi me caigo de la silla al leer ayer que Red Bull ha tenido un problema de correlación de datos que ha comprometido su inicio de temporada (sic), aunque bien mirado, a lo mejor todo consiste en que la austriaca ha puesto sus credenciales sobre la mesa para lo que queda de campaña y 2018.

Un error de estas dimensione es grave. Las diferencias entre la información obtenida en el túnel de viento, su tramitación en el CFD (Computational Fluid Dynamics) y lo que se observa posteriormente en la pista, pueden tirar abajo un proyecto sin denasiados miramientos, porque entre que casi no hay entrenamientos y la limitación de horas de trabajo es más puntillosa que los presupuestos de don Cristóbal Montoro para las Autonomías, apenas hay margen durante la sesión para reparar un siete de ese calibre.

Y el caso es que el RB13 tampoco ha ido tan mal. Max ha sufrido lo indecible por fiabilidad y exceso de testosterona pero cuando ha puntuado no ha estado por debajo del quinto puesto, y Daniel incluso conseguía una sonora victoria en Bakú, eso sí, con Mercedes AMG y Ferrari en plan telonero. Total, que ahora resulta que con un coche tarado, Bala naranja parecía un tiro y Aussie junior va cuarto en el Mundial de Pilotos con 117 puntos, tan sólo a 85 de Vettel...

Disculpadme el tonillo, que sé que se me nota, pero entre que cada vez me tomo con más recelo las cosas que se publican y veo en este asunto numerosas cosas que no encajan, tengo la mosca en la oreja desde que me llegó lo dicho por Horner mientras escribía la entrada sobre Lewis.

Yo diría que Verstappen y Ricciardo han sobrellevado como han podido, que es decir bastante, un RB13 que ha adolecido de carencias en unidad de potencia y hasta aquí podemos leer, que decía aquél.

El chasis parece sobresaliente, como la mayoría de cisnes que salen de la cabezota de Adrian, y la aerodinámica, incluso con el caballaje por debajo de lo esperado, ha sido algo más que resultona en terreno virado. Así que una de dos, el error de correlación ha sido minúsculo, o Red Bull se prepara para ponernos los dientes largos a partir de Bélgica ahora que parece que Renault está en orden de revista.

Y es que como hay que justificar la tradición de volver de vacaciones armados hasta los dientes mientras agosto es inhábil, o casi, para el resto de equipos, aprovechando que la FIA ha abierto la mano con Ferrari a cuenta de la solución de algunos problemas en su propulsor —que en sentido estricto deberían haber acarreado sanciones—, pienso que tal vez Red Bull ha comenzado a preparar el terreno mencionando los suyos con el túnel y el CFD, por si hay que liarse a boinazos en los despachos.

En todo caso, es tempranito, terminamos semana y me he dicho pues vale porque ya queda menos para que veamos cómo queda la cosa en Spa-Francorchamps.

Sed buenos. Os leo.