Rompiendo todos los pronósticos en cuanto al parecido que podía tener con el MP4/29 de McLaren (ambos comparten la misma unidad de potencia, Mercedes-Benz), el W05 que presentó ayer por la mañana Mercedes AMG momentos antes de que Lewis lo hiciera rodar en la pista de Jerez, sorprendía a expertos y profanos por su limpieza de líneas, por sus comedidas bocas de ventilación, y por la adopción de un morro muy similar en diseño al utilizado por Ferrari en su F14-T.
El coche de Brackley mantiene la configuración de suspensiones de sus hermanos mayores, pull-rod en el eje trasero y push-rod en el delantero, lo que ayudará a mantener un rake que está enfocado a extraer del fondo plano todo el aire posible en aras de conseguir la añorada downforce.
Así mismo, el dibujo lateral de sus pontones es curvado, lo que sumado a su aparente reducido tamaño, apunta a que la zaga y el área del difusor van a cobrar suma importancia en la desenvoltura del vehículo en pista.
Así mismo, el dibujo lateral de sus pontones es curvado, lo que sumado a su aparente reducido tamaño, apunta a que la zaga y el área del difusor van a cobrar suma importancia en la desenvoltura del vehículo en pista.
En este sentido, cabe decir que el torneado estrecho de la parte inferior de los mismos y el pequeño cubrecapot dotado de aleta, se intuye que ayudarán a que los flujos que circundan el monoplaza tras haber sido divididos en la zona del splitter y el boat y pasar por encima de la carrocería, alcancen la máxima velocidad al llegar a la zona posterior del coche, permitiendo así que el difusor trabaje a un alto rendimiento ahora que no dispone del apoyo del beam wing.
En la parte inicial, como comentábamos más arriba, el W05 se parece al F14-T, ofreciendo un volumen principal muy horizontal que se corresponde con el principio de la célula de seguridad que rodea al piloto en el habitáculo, del que surge una nose rectilínea y plana en su superficie superior, que ataca directamente al extremo interior del ala delantera.
La solución, a diferencia de la usada en el coche italiano, no me parece que atienda tanto a la flexión de la nariz como resultado del avance del vehículo, como a dividir el caudal de aire frontal, dejando que sea el alerón el que haga el grueso del trabajo de apretar el tren delantero al suelo —el accidente sufrido ayer por Hamilton en Jerez, con pérdida de ala incluida, me refuerza en esta idea—.
En líneas generales, aunque no parece novedoso porque ya estamos vacunados de tantas novedades como hemos visto, el W05 es resultón y muy inteligente en su diseño, y si es capaz de solventar los tradicionales problemas con los compuestos que han sufrido en los comienzos de temporada sus hermanos de saga, muy posiblemente sea un hermoso candidato en manos de Nico Rosberg y Lewis Hamilton, para copar los primeros puestos durante este campeonato que ya ha comenzado a dar sus primeros pasos.
Nos leemos.
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