Como en el tenis, McLaren ha clavado otro año en blanco por arriesgar
con los tiros bajos y profundos. El MP4/27 comenzó impecablemente la
sesión (Button marcaba tanto en Melbourne), pero los errores de la
escudería le hicieron perder set tras set hasta que Hamilton rompía el saque en favor de la de Woking en el Gilles Villenueve.
En aquel preciso instante ni era tarde ni todo lo contrario. La
temporada transcurría a golpe de ganador por carrera, y la consecuente
sangría de puntos beneficiaba y perjudicaba a todos por igual. Nada
parecía indicar que el tiempo se agotaba, sobre todo para el equipo
británico, porque en una de esas decisiones tontas que se toman a veces,
las evoluciones diseñadas para que el coche siguiera sobreviviendo
vinieron a suponer una especie de mal de ojo automedicado, ya
que lejos de mejorar su estado o incluso estabilizarlo, lo sometío a un
retroceso de prestaciones en carrera que a la postre definiría un
comienzo de verano para olvidar, of course!
En Alemania, Jenson sacaba la cabeza para
McLaren con un más que merecido segundo puesto tras Fernando Alonso. En
Hungría, era Lewis quien materializaba la posible resurrección,
liderando la prueba magiar de cabo a rabo, en lucha cerrada con los
Lotus de Raikkonen y Grosjean. Y en Bélgica, Button de nuevo, sancionaba
aunque con alfileres, la bondad del camino tomado.
Pero si Spa iba a ser la tumba de las aspiraciones del asturiano de
Ferrari, también iba a suponer un brutal puntapié en la espinilla de
Woking, porque a renglón seguido, McLaren comenzaría a ser presa de
avatares deportivos y mecánicos que arrojarían un saldo bastante
sombrío, cuando no negro zahíno: Lewis Hamilton había anunciado su
salida de McLaren antes de la celebración del G.P. de Japón; la
escudería británica perdía en Corea, en favor de su archienemiga
Ferrari, la segunda posición en la general de marcas; y para colmo de
males, Jenson Button renunciaba a sus aspiraciones al título a falta de
tres pruebas para el final.
Lewis rompía caja de cambios en Singapur y bomba de gasolina en Abu
Dhabi, abandonando por colisión en Interlagos. Jenson se retiraba en
Suzuka y pare usted de contar. Hamilton ganaba en Texas y Button lo
haría en Brasil, pero para esas alturas de la película ya no había bola
de partido que jugar porque todas las opciones se habían perdido meses
atrás. La acumulación de errores humanos sufridos en la parte inicial de
la temporada (fundamentalmente en los pasos por garajes), la
incomodidad mostrada por Button con el calzado indicado por Pirelli
hasta pasado el verano, la falta de idoneidad de las evoluciones
propuestas para el MP4/27 en junio y julio, sumadas a una incomprensible
fragilidad mecánica y a la fatídica intervención de Romain Grosjean en
Spa, fueron todas ellas la serie de circunstancias que hicieron llegar a
la cita brasileña a una McLaren herida en sus alas y jugando a la
defensiva.
No obstante, Interlagos podía haber dado la vuelta a esta tortilla
que estoy describiendo, aunque desgraciadamente, Nico Hulkenberg se
encargaría de borrar cualquier atisbo de sonrisa en Woking al llevarse
puesto a un Lewis Hamilton que ha mostrado un excelentísimo nivel
durante todo el año.
La lectura, lejos de ser tan sencilla como se insinúa en estas
líneas, tiene multitud de matices, como no podía ser de otra manera, a
pesar de que el saldo final es el que arrojan los números que tasan los
resultados. Atendiendo a él, McLaren, como decía al comienzo, ha vuelto a
clavar otro año en blanco y eso es lo que cuenta. Tercera en el
Campeonato de Constructores, Lewis Hamilton ha hecho cuarto en el de
Pilotos a casi 100 puntos de Sebastian Vettel, por detrás de Kimi
Raikkonen y por delante de Jenson Button, quien ha firmado una temporada
bastante tristona a pesar de haber ganado tres carreras (Australia,
Bélgica y Brasil).
Woking, out!
Os leo.
Como decía, McLaren le ha pedido prestada la capa de invisibilidad a su amigo "Press" Potter mientras toman te, hablan de las tácticas de Alonso y la estrella británica del automovilismo se va dando un portazo porque esta cansado de tanto te y el quiere café y pasteles.
ResponderEliminarY no os preocupéis!!! que algunos alemanes (Speed week) han hecho cuentas con las vueltas rápidas en carrera y han certificado que el coche inglés ha sido el mas rápido y que su Vettel ha ganado con el segundo mejor coche !!!! Wow. Después va el Lotus y en cuarta posición unos que pintan el coche de Rojo.
Pues sí, McLaren ha sido el gran fiasco de este año. En poco tiempo han perdido a dos de los mejores pilotos de todos los tiempos. Nuestros queridos sajones son así por mucho que critiquen a los denostados latinos. :)
ResponderEliminarKing Crimson