Renault no parecía acertar en Barcelona a pesar del octavo puesto logrado por Robert Kubica y del undécimo obtenido por Petrov. La razón aparente podría insinuar un posible desinfle, aunque soy de la opinión de que la realidad se imponía en Montmeló, evitando los naufragios de la competencia que tan sabrosamente ha sabido aprovechar el piloto polaco en las pruebas anteriores, devolviendo a la escudería francesa al lugar que ocupa realmente.
Sin embargo, Mónaco viene que ni pintado a las características del R30, pues es un circuito que penaliza las batallas largas y los coches poco equilibrados. Dicho esto, es previsible que ante la cita del próximo domingo Renault vuelva a mostrarse momentáneamente solvente, y que el de Cracovia pueda deleitarnos con una actuación a la altura de las expectativas que él mismo ha levantado en este pasado comienzo de temporada.
En cuanto a lo mencionado con anterioridad al G.P. de España, sigo esperando que el estado de gracia mostrado en las cuatro carreras iniciales se prolongue al menos hasta agosto.
Robert (hoy):“Normalmente, en el pasado, estaba acostumbrado a tener unos alerones diferentes con una mayor carga aerodinámica. […] Desafortunadamente, no tenemos una carga aerodinámica específica para esta carrera. Vamos a utilizar prácticamente los mismos alerones que durante todo el año.” Feo asunto. Pero…
ResponderEliminarL1.1: ¿Tercero?
L1.2: ¿Sexto?
:O
Kubica vuelve a ser la sorpresa favorable de la jornada... a ver el sábado hasta donde da en este circuito que prima menos el agarre aerodinámico.
ResponderEliminarBuenos días.
ResponderEliminarJ-Car ;) Pues mira por dónde ayer el polaco nos dejó con la boca abierta XDDDDDD ¡Es un puto fenómeno! XDDDDDDDD
Jon ;) Es cierto que el R30 parecía que ni pintado para Mónaco, pero de ahí a sacarle tantas astillas XDDDDDDDD
Un abrazote
Jose