Tras superar diferentes vicisitudes, la aventura española en escuderías de F1, ha llegado por los pelos a ser mostrada antes de Bahrein, pero con demasiadas incertidumbres a cuestas.
Su chasis viene firmado por Dallara, y lo que podría ser una garantía se diluye bastante ante la evidencia de que el vehículo no ha recorrido ni un solo kilómetro en entrenamientos, y por tanto nada sabemos de su comportamiento. En cuanto al diseño cabe decir muy poco aparte de que parece haber sido propuesto para garantizar el aprovechamiento de los flujos inferiores desde el alerón delantero (monumental pero sencillo) hasta la definición del área del difusor, ya que la carrocería alta no parece aportar novedades, más allá de un morro que recuerda al Virgin y que se situa a una altura mediana sobre el plano anterior.
Propulsado por un motor Cosworth del que sí podemos comentar sus razonables prestaciones pues es el mismo que empuja a Williams, Lotus y Virgin, el monoplaza queda en manos de Bruno Senna y Krun Chandhok, ambos pilotos sin experiencia alguna en F1.
Por todo ello, mi conclusión es poco halagüeña. Si llegar a la cita asiática puede ser considerado en cierto modo un éxito, la verdad es que se ha llegado a ella con el agua al cuello, con poco presupuesto y sin patrocinadores visibles, lo que me anima a pronosticar que salvo que medie un milagro, Hispania puede perfectamente no llegar entera a Europa, suponiendo la segunda deserción de los equipos que llamados por Mosley venían a resolver los graves problemas que aquejan al deporte. Obviamente, la primera ha sido USF1.
http://www.superdeporte.es/formula1/2010/03/11/crisis-abrio-puertas-despues-estrangulo/89256.html
ResponderEliminarEntrevista a Adrián Campos. No se si decir que está triste o desilusionado.
Buenas tardes.
ResponderEliminarTadeo ;) Gracias por pasarnos el enlace ;) Yo diría que ambas cosas a la vez, y no es para menos, por eso me alegro de que reivindique que fue el fundador, porque con tanto lío alrededor habrá incluso quien se olvide de eso.
Un abrazote
Jose