Mis conclusiones [Red Bull]

Red Bull ha firmado una campaña de enmarcar, no sólo por haber tomado la salida con uno de los mejores vehículos de la parrilla sin necesidad de subterfugios ni excesos de creatividad en cuanto a aplicar la letra del reglamento deportivo vigente este año, sino también porque ha sido una parte indiscutible del espectáculo.

El RB5 diseñado por Adrian Newey mostraba los dientes a los Brawn GP desde las primeras de cambio, alcanzando 6 victorias y otros 6 segundos puestos a manos de sus pilotos, lo que dice mucho de sus consistencia y efectividad en pista.

Dicho esto, como auguraba en marzo, el puntito destacable lo iban a poner Sebastian Vettel y Mark Webber, y así ha sido. El primero rubricando que ya es un piloto hecho y derecho que sigue manteniendo su innegable calidad en agua y que ha hecho los deberes en cuanto a su comportamiento sobre seco, mostrando una madurez al volante que sólo ha desfallecido en momentos puntuales, pero que no ha sido óbice para que al final se haya calzado el subcampeonato del mundo en dura batalla con Rubens Barrichello. Y el australiano, consiguiendo la primera victoria de su dilatada carrera profesional (Alemania), y la segunda (Brasil), y poniendo de relieve con ello que la edad no es una traba cuando se plasma sobre el asfalto como experiencia de la buena.

Juntos conseguían tres dobletes para la casa austriaca (China, Gran Bretaña y Alemania), y han peleado entre sí y contra los demás rivales con una limpieza que merece ser destacada.