G.P. de Australia [Melbourne]

El trazado semi-urbano de Albert Park, en Melbourne, discurre en buena parte de su recorrido sobre las calles de la ciudad australiana, por ello, al ser usado solamente una vez al año, la pista está particularmente sucia al comienzo de los entrenamientos del fin de semana, lo que hace que el viernes sea complicado circular hasta que el paso de los vehículos limpia el asfalto y la goma depositada permite que mejore el grip. Sin embargo, para las clasificaciones del sábado, el polvo casi ha desaparecido, y los coches pueden circular sobre un asfalto suave que no resulta abrasivo con los neumáticos, lo que no impide que la carrera sea famosa por la gran cantidad de abandonos, debido, sobre todo, a que las altas temperaturas que se viven pasan factura sobre máquinas, compuestos y pilotos.

Aerodinámica

El recorrido discurre dentro de un parque temático y presenta una pista casi lisa y rápida, compuesta de varias curvas de mediana velocidad, con algunas chicanes rápidas, que se entrelazan entre ellas a través de una sucesión de rectas no demasiado largas. Por tanto, para circular por él, se requiere un nivel alto de carga aerodinámica en lo monoplazas, que aunque lastra su rendimiento en recta favorece que en las curvas vayan pegados al suelo.

Frenos

La sucesión de curvas y chicanes, así como lo deslizante del asfalto, origina que el trazado sea muy exigente con los frenos, porque estos están sujetos a una constante utilización, con el agravante de que son uno de los elementos que más sufren por las altas temperaturas bajo las que se desarrolla la carrera.

Neumáticos

A falta de conocer cómo responderán los vehículos bajo la nueva normativa, podemos decir que en años anteriores, la carga aerodinámica y lo suave del asfalto, hacían recomendable el uso de los compuestos más blandos, lo que generaba algunos problemas de subviraje y de desgaste excesivo en las gomas delanteras. Sin embargo, este año el problema puede trasladarse atrás, ya que con la tendencia sobreviradora de los nuevos coches, con mayor ala, y con mucho calor ambiente, tal vez sean los neumáticos traseros los que digan basta antes de tiempo.

Motor

De manera similar a lo que hemos mencionado con respecto a los frenos, los propulsores estarán también sometidos a un continuo castigo debido a las dificultades del trazado, a los constantes cambios de régimen, y al calor reinante, aunque la reducción de revoluciones (18.000 rpm.) puede suponer un interesante balón de oxígeno de cara a preservar su durabilidad.

Una vuelta a Albert Park

Aceleramos a fondo, logrando una velocidad cercana a los 310 Km/h al final de la recta de boxes, antes de frenar y reducir a 3ª para tomar la primera curva a la derecha (135 Km/h), y una vez superada, abordar una curva a la izquierda (el enlace es casi una chicane), acelerando y pasando por el ápex a 200 Km/h, en 4ª velocidad.

En la corta recta que sigue, continuamos acelerando hasta lograr los 300 Km/h, para frenar y reducir hasta los 80 Km/h al tomar la curva a la derecha que surge, y que se salva en 2ª velocidad y acelerando. De nuevo, ésta es seguida casi inmediatamente por otra curva a la izquierda, frenando muy levemente para tomarla a unos 145 Km/h, en 3ª.

Aceleramos de nuevo para iniciar la larga curva a la derecha que se presenta ante nosotros, frenando inicialmente (215 Km/h, en 4ª velocidad) y ganando velocidad posteriormente, para discurrir a través de una recta relativamente corta, a la que se llega sobre los 280 Km/h, antes de reducir de nuevo para salvar una curva de 2ª velocidad, que se toma a menos de 130 Km/h.

El trazado siguiente nos ofrece ahora una curva larga y amplia hacia la derecha que se puede abordar a fondo (nuestro cuerpo recibe la máxima fuerza centrífuga cuando alcanzamos los 265 Km/h, en 5ª). A su salida corremos a unos 285 Km/h antes de frenar y bajar a 100 para pasar sin problemas la siguiente curva de 2ª velocidad, a derechas.

Una rápida zona de intercambio desemboca en una larga curva a la izquierda que requiere toda nuestra concentración, ya que se entra aproximadamente a 180 Km/h, en 3ª velocidad, y se sale a 300. A partir de aquí, el trazado nos ofrece una difícil chicane de 4ª velocidad, que se inicia en velocidades cercanas a los 210 Km/h, para terminarla a unos 300 Km/h, enfocando la recta. La siguiente curva es a derechas, de 2ª velocidad (la primera de dos muy complicadas) y debemos tomarla a 120 Km/h. Entre ésta y la siguiente (también a derechas), disponemos de un leve período de aceleración en recta que nos permitirá alcanzar los 230 Km/h, en 4ª. Tenemos que mantener la 4ª marcha para recorrer el siguiente tramo, para afrontar la apretada curva a la izquierda que surge delante, reduciendo inicialmente hasta los 50 Km/h, y que una vez superándola con unos 245 Km/h, para bajar de nuevo a 2ª velocidad y tomar así la siguiente curva a la izquierda, con unos 80 Km/h de velocidad.

La última curva (a derechas) desemboca en la recta de meta, y debemos superarla en torno a los 150 Km/h, en 3ª marcha, pues de cómo de bien lo hagamos dependerá en buena medida la velocidad que alcancemos en recta, porque una buena salida de esta curva es crucial para disponer de suficiente empuje para iniciar otra vuelta.

Palmarés

Ganador 2008: Lewis Hamilton, McLaren

Ganador 2007: Kimi Raikkonen, Ferrari

Ganador 2006: Fernando Alonso, Renault

Ganador 2005: Giancarlo Fisichella, Renault

Ganador 2004: Michael Schumacher, Ferrari

G.P. de Australia [Datos de interés]

Vueltas: 58

Longitud: 5.303 metros

Distancia total: 307.574 Kms.

Curvas: 16 (17 incluyendo Hill, no contemplada por la FIA)

Vuelta rápida: 1:24.125 M. Schumacher (2004, Ferrari)

Récord de pole: 1:24.646 R. Barrichello (2004, Ferrari)

Pole 2008: 1:26.714 L. Hamilton (McLaren)

Se podrán seguir todas las pruebas del Gran Premio a través de la página de La Sexta, incluyendo los libres 1, 2 y 3, la clasificación y la carrera. Y ¡ojo con los despertadores!, el domingo 29 de marzo hay cambio de hora, a las 02:00 hay que adelantar el reloj a las 03:00.